Nuevas técnicas partidistas, en busca del voto indeciso de izquierdas

Yolanda Díaz, la sorprendente, curiosa e inesperada Vicepresidente Segunda del Gobierno, acaba de incorporar al lenguaje político español un término muy fácil de entender SUMAR.

Es una evidencia indiscutible, que todos los candidatos, cuando se presentan pretenden ir sumando y capitalizando votos, sin embargo hasta ahora a nadie se le había ocurrido denominar así a un partido político.

Pablo Iglesias recurrió a PODEMOS, su alumno más aventajado Iñigo Errejón a MAS MADRID y ahora la deslumbrante y recompuesta Princesa Roja que yo creía que se incorporaría a la Izquierda Unida del Garzón más incompetente de España, se inventa SUMAR con el objetivo de restarles a todos los otros congéneres suyos.

Parece un contrasentido evidente, utilizar esa nombre para RESTAR a los demás comunistas que aspiran al poder, en beneficio propio y personal.

Recientemente y a través de amigos comunes, he  tenido el placer de leer los artículos de opinión de José María Lozano para otro medio digital y he recibido el último titulado GANAS DE GANAR.

Brillante como todos los suyos.

Pero su lectura me ha impulsado a escribir la presente columna, para contrastar la diferencia que hay entre SUMAR Y RESTAR,  cuando se habla en términos políticos y sobre todo electorales.

Los españoles nunca podremos agradecerle bastante a esa pléyade de politiquillos, entre los treinta y cinco y cuarenta y cinco años, salidos de las Universidades filo comunistas de España, que se trituren sistemáticamente entre ellos, tratando de disputarles voto a voto, la escasa cosecha que han tenido en el mejor de los casos en los comicios llevados a cabo en los últimos años, sobre todo a niveles autonómicos, aunque también en las elecciones generales.

Me podrán argumentar, algunas de las pocas mentes brillantes y equilibradas del centro-izquierda, que también por la derecha, ha salido VOX a competir con el Partido Popular, pero ha sido sólo un partido y ante las lamentables políticas de Rajoy y Casado, que se olvidaron en gran manera de las políticas e idearios  liberales tradicionales del centro derecha, para captar votos que pertenecían de pleno derecho al centro-izquierda, cuando este  aún no había emprendido  su peregrinaje hacia la izquierda radical de Zapatero primero y Pedro Sánchez ahora.

Pero en definitiva es evidente, que entre el PP de ahora del gallego Feijoo  y VOX, los españoles de derecha y centro derecha, podremos elegir lo que más nos guste, pero todos sabemos que al final están condenados a entenderse como ya ha ocurrido en Castilla-León y muy pronto se verá aún de una manera más palpable en Andalucía.

Cuando el voto de izquierda radical se reparte entre tantos, son muchos los escaños que se pierden entre los restos inservibles de todos ellos.

Eso no lo quieren verlos advenedizos izquierdistas, que pretenden ser todos CABEZA DE RATÓN, mejor que  COLA DE LEÓN y así les va, gracias a Dios.

Por eso, les comento yo aquí a todos mis amigos y lectores habituales, que las GANAS DE GANAR,  como se titula la columna de mi amigo José María, se confirman de este modo, del mismo modo que “el movimiento, se demuestra andando”.

Un saludo a todos y hasta la semana que viene.