Moda indecente: un reto viral obliga a cerrar una piscina valenciana
Con el verano, es habitual encontrar estas desagradables sorpresas en el agua
Una desagradable actitud se está poniendo de moda entre los bañistas: defecar en una piscina, obligando a tener que cerrar las instalaciones para la limpieza y desinfección de la misma.
Esto es lo que les ha pasado a la piscina municipal de Gilet.
Desde el Ayuntamiento de Gilet han anunciado que la piscina permanecerá cerrada este lunes. “Estamos trabajando para abrir cuanto antes. Perdonad las molestias”.
Así lo indicaban en la cuenta oficial de este consistorio valenciano.
Y es que el “reto viral de defecar en las piscinas” demuestra que “no hemos avanzado mucho”, señalan desde el consistorio.
Se trata de un acto de incivismo absoluto que puede ocasionar la aparición de bacterias que pueden suponer un riesgo serio para la salud, teniendo en cuenta que se trata de agua estancada en un mismo lugar durante mucho tiempo.
Cómo actuar en caso de contaminación fecal
En este caso, las heces deben retirarse rápida y completamente de la piscina y eliminarlas por el inodoro, nunca por los desagües de la piscina.
A continuación todo el equipo que se ha utilizado en este proceso debe desinfectarse con una solución de hipoclorito al 1%.
Transcurrido un tiempo prudencial, se regularan los valores de cloro y pH de acuerdo con los valores establecidos en la normativa vigente antes permitir de nuevo baño.
