El primer paso de las obras de construcción de la rotonda de La Puerta del Sol ha sido la retirada de una palmera que será trasplantada en la Plaza del Teatro Alcázar
Con esta actuación se persigue “eliminar un punto negro para el tráfico rodado en el municipio” tal y como destacó el alcalde, Mario García, consiguiendo a su vez agilizar y dar mayor fluidez a la circulación de vehículos. Hay que tener en cuenta que esta es una de las principales vías de comunicación en el interior de la población, de ahí que se hiciera indispensable una actuación que garantizara además de la fluidez, la seguridad de los conductores.
La nueva construcción afectará a una parte del mencionado jardín, de ahí que antes de iniciarse las obras haya sido necesario que desde la concejalía de Obras se proceda a la retirada de la palmera que, según explicó el concejal responsable del área, Manuel Martínez, será transplantada en el parque situado frente al Teatro Alcázar, donde hace algún tiempo había muerto una de las palmeras.
Mario García señala que este proyecto estaba incluido entre las propuestas que el Partido Popular plasmó en su programa las pasadas elecciones “y es otra promesa que se hace realidad”. Cabe recordar que desde que comenzaron las obras de construcción del parking subterráneo y con la conversión de la antigua travesía de la N-340 en bulevar urbano, el tráfico de las calles Purísima y San Bartolomé, ya considerable, se había intensificado ostensiblemente. Si a ello sumamos que este cruce de semáforos permite la circulación en todas las direcciones, se ratifica la necesidad de realizar alguna actuación que permita eliminar el riesgo de accidentes, que en este punto se producen con cierta frecuencia.
