Compromís reclama al Ministerio protección para el arroz valenciano ante las importaciones sin control
Compromís ha reclamado al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) que salvaguarde los intereses de los productores de arroz ante el aumento sin control de las importaciones. Al mismo tiempo la coalición ha denunciado que el mercado del arroz, tanto blanqueado como en corteza, funciona en la práctica como un monopolio, por lo que ha solicitado al Ministerio que vigile estas prácticas ilegales que han sido trasladadas a la coalición por los afectados.
“Sorprende”, señala el senador valenciano designado por les Corts, “que aseguren conocer de forma pormenorizada el impacto de dichas importaciones en nuestro sector y la evolución de las mismas, pero no que los productores de terceros países estén actuando como un monopolio que condiciona la viabilidad de un cultivo de tal importancia socioeconómica para las zonas húmedas como lo es el arroz”.
Para Compromís “es injusto para el futuro y viabilidad de nuestros productores la competencia de terceros países, con menores costes de producción, cuyas exportaciones entran en la Unión Europea a arancel cero sin limitación de cantidades”, algo que choca con el supuesto control que ejerce la Comisión a las importaciones de países terceros.
Los países denominados EBA, especialmente de Myanmar (antigua Birmania), están incrementando de forma notable sus importaciones a Europa. En los dos últimos años ha pasado de exportar a la Unión Europea 11.731 toneladas en la campaña 2012/2013 a 128.916 toneladas en la campaña 2013/2014. Camboya también ha aumentado las exportaciones de manera significativa, de las 108.286 toneladas de la campaña 2011/2012 a 251.302 toneladas en la campaña 2013/2014. Hay que recordar que las importaciones que se realizan de estos países se hacen con 0% de arancel y sin contingente, lo que unido al aumento de costes del producto local da como resultado el hundimiento del mercado y el futuro de amplias zonas agrarias. “Se trata de una situación similar a la de los cítricos africanos que, a pesar del control europeo, vemos como el ministerio fía su suerte a un supuesto control europeo que claramente no se da “al encontrarnos con naranjas africanas todavía en enero por los mercados”.
La falta de agilidad ante los problemas denunciados se da hasta para contestar una simple pregunta parlamentaria que colea desde septiembre y que se ha contestado en marzo. “Lo que nos da muy poca desconfianza del interés del ejecutivo español que ante una denuncia de prácticas monopolísticas de tal calibre por parte de los productores, contesta que en el citado Ministerio no les consta dicha existencia y los deriva a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, en vez de adoptar medidas como aplicar aumentos en el precio de intervención para salvaguardar los intereses españoles o limitar unas importaciones que están destruyendo el futuro del sector primario europeo”, ha concluido.
