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Amparo Marco: “Alberto Fabra no debería consentir que la Generalitat trate a Castellón como una ciudad de tercera”

Amparo Marco: “Alberto Fabra no debería consentir que la Generalitat trate a Castellón como una ciudad de tercera”
  • Los socialistas de Castellón presentan una iniciativa plenaria para reclamar el pago de la deuda de la Generalitat al municipio

La portavoz socialista de Castellón, Amparo Marco, exige al Gobierno de la Generalitat el pago íntegro de las deudas con el Ayuntamiento, correspondiente a los compromisos de inversión, acuerdos y convenios que se arrastran desde hace años y que afectan al desarrollo de la actividad municipal. “Es hora ya de que Valencia responda y cumpla. La Generalitat no puede tratar a Castellón como una ciudad de tercera y Alberto Fabra no debería consentirlo”, afirma.

Los socialistas de Castellón han presentado una declaración institucional para que el Gobierno valenciano salde los ‘números rojos’ que tiene con el Ayuntamiento. En caso de que el pago no pueda ser inmediato, se pide a la Generalitat que fije el calendario para el pago de la deuda que arrastran las diversas consellerias y sus organismos dependientes. El Consell adeuda a Castellón la cantidad de 10 millones de euros.

“Las administraciones atraviesan momentos que dificultan la prestación de servicios a la sociedad”, afirma Marco, quien señala que “en el contexto global de crisis, la situación económica y de los municipios se encuentra al límite, al no haberse resuelto su financiación en la Ley de Régimen Local Valenciana, por lo que los incumplimientos del Consell tienen efectos dramáticos para los municipios”.

Marco incide en que “la prestación diaria de servicios a la ciudadanía está en entredicho” y muestra su preocupación por el efecto que estas circunstancias tienen en la tesorería municipal. “Aunque se pueda pensar que no hay ninguna intencionalidad de empobrecer más aún a los ayuntamientos, ese es el resultado de las decisiones tomadas por los gobiernos de la Generalitat y del Estado”, resalta.

“Los ayuntamientos han demostrado siempre su lealtad institucional y solidaridad con el resto de administraciones. Pero la situación es límite. A los castellonenses se les están pidiendo mayores esfuerzos económicos con el incremento de los precios de los servicios públicos y los impuestos locales y además se le pide que comprendan los ajustes. No podemos tensar tanto la cuerda”, concluye.

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