Marco censura el “anticastellonerismo” del PP al negarse a reprobar el veto del Gobierno al Corredor Mediterráneo y renunciar a exigir la deuda del Consell

La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Castellón, Amparo Marco, ha censurado el “anticastellonerismo” del equipo de gobierno al negarse a reprobar al Gobierno central por votar en contra de la financiación del Corredor Mediterráneo en la Unión Europea. El Partido Popular se ha negado, asimismo, a apoyar una declaración institucional del PSPV en la que se exigía a la Generalitat que saldara la deuda de más de 8 millones de euros que mantiene con la ciudad de Castellón.

“El PP vuelve a votar en contra del interés general de Castellón”, afirma Marco, quien considera que “la actitud cómplice del alcalde con el Gobierno y el Consell está causando un gran daño al futuro de Castellón”. “Los socialistas no nos quedaremos de brazos cruzados cuando desde otras administraciones públicas se estén atacando los intereses de la ciudad”, resalta.

El grupo municipal socialista de Castellón había presentado una declaración institucional para que el pleno de la Corporación censurara la actuación “irresponsable” del Gobierno central por votar en contra de la financiación del Corredor Mediterráneo en la Unión Europea, “con el agravante político de haber sido el único Gobierno de los Veintisiete que se opuso a los proyectos prioritarios de la red transeuropea de transporte que recibirán fondos comunitarios”. El PP la ha vetado hoy en la Junta de Portavoces.

También ha rechazado otra iniciativa por medio de la cual se exigía a la Generalitat que liquidara la deuda que mantiene con el Ayuntamiento de Castellón y que “está lastrando el funcionamiento de la actividad municipal”. Los socialistas piden explicaciones a Bataller por “defender antes los intereses de su partido que los de la ciudad”. “La ciudad no ha ganado nada con el hecho de que el presidente de la Generalitat haya sido alcalde de Castellón. Al contrario, porque el equipo de gobierno municipal se está sometiendo sin oposición a las directrices que se establecen desde Valencia”, remarca.

“Castellón está perdiendo oportunidades de futuro con un equipo de gobierno que está atado de pies y manos. Las decisiones que se adoptan en Madrid y Valencia están lastrando la estrategia de desarrollo de la ciudad, en unos momentos en los que es más necesario que nunca contar con el refuerzo de otras instituciones”, indica Marco. “Castellón no se merece unos gobernantes que no saben, no pueden o no quieren defendernos”.