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Pep Grau afirma que “el alcalde de Castellón no tiene las manos limpias si no aclara los tejemanejes del Gürtel”

  • El concejal y secretario general del PSPV en Castellón dice que “el ciudadano de a pie es que paga la corrupción del Partido Popular con más impuestos y menos servicios”

El concejal socialista y secretario general del PSPV-PSOE de la ciudad de Castellón, Pep Grau, afirma que “el alcalde de Castellón no tendrá las manos limpias si no aclara los tejemanejes con las empresas del Gürtel”. Las revelaciones del sumario del caso apuntan que el grupo municipal del Ayuntamiento de Castellón contrató la organización del congreso local del PP en 2005, además de otros actos preelectorales en 2007. Por el momento, la cuantía de los contratos del PP de Castellón con la trama supera ya los 30.000 euros.

“Alberto Fabra tiene la obligación ética de comparecer ante la ciudadanía y explicar con detalle qué tipo de relación comercial han mantenido el PP de Castellón y el grupo municipal popular con el Bigotes”, afirma Grau. “Los populares deben despejar las dudas sobre la financiación de las campañas electorales de los últimos años. Si no lo hacen, confirmarán la veracidad de las investigaciones policiales y judiciales”, dice.

Grau considera que “el alcalde no puede limitarse a afirmar que todo es legal, porque el ‘caso Gürtel’ lo que está demostrando, precisamente, es que hay poco de legal en las contrataciones del PP con Orange Market, la empresa del Bigotes, porque encubren la extorsión a empresas adjudicatarias del Ayuntamiento de Castellón para que pagaran su actividad electoral”.

El dirigente socialista censura las “mentiras” de los responsables del PP local y provincial, que han negado durante los últimos 14 meses las conexiones entre las instituciones públicas que gobiernan y las empresas de la red Gürtel. “Carlos Fabra mintió cuando dijo que el PP de Castellón nunca había contratado con el Bigotes y Carmen Amorós insistió en el engaño al afirmar que Orange  Market jamás había trabajado en Castellón”, señala.

“Los Fabra y Camps han estado tan ocupados y tan preocupados por financiarse de forma irregular que han abandonado sus responsabilidades de gobierno. El ciudadano de a pie es el que está pagando la corrupción del PP. Las subidas de impuestos de los últimos años en el Ayuntamiento de Castellón se han perpetrado para cubrir la evasión del dinero público que tenía que haber servido para mejorar infraestructuras y tener una mejor calidad de vida ciudadana y que ha acabado en manos mafiosas”, concluye.

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