Compromís califica de "políticamente cobarde" el silencio de Barcala ante la gestión de Llopis, “que sólo defiende la extrema derecha”
Natxo Bellido: "La posición de Julia Llopis en el bipartito es insostenible y sólo los ultras reivindican su gestión sectaria, definida por el fracaso e ir contra los derechos de la mayoría de alicantinas y alicantinos"
Los concejales del grupo municipal Compromís, Natxo Bellido y Rafa Mas, han vuelto a calificar de "insostenible la situación de la concejala de Educación y Servicios Sociales en el Ayuntamiento y han denunciado que mientras sus compañeros / as ya no se atreven a defenderla con convicción debe salir nuevamente la extrema derecha en rescatarla".
Tal y como ha declarado el portavoz municipal, Natxo Bellido "el señor Barcala no se puede esconder detrás de los ultras de VOX para defender una gestión marcada por la falta de empatía hacia los sectores de la población más vulnerables y una cruzada contra la educación pública en beneficio de sus amigos de la privada. Barcala no puede esconderse, callar y no actuar ante la evidencia del impacto negativo de la gestión de una concejal que abandona a las personas en exclusión social, bloquea las mejoras de la red pública educativa y sólo se preocupa de quedar bien ante el electorado más ultra y de una poderosa minoría que no están dispuesta a perder privilegios en beneficio de una sociedad más equitativa y que promueva la igualdad de oportunidades y la cohesión social. No basta con apartarla de la Junta de Distrito 2, como ha hecho dada su beligerancia frente al tejido asociativo de los barrios de la Zona Norte. Luís Barcala tiene la obligación de dar la cara y tomar decisiones. La posición de Llopis es insostenible y el PP debe destituirla. Y si Barcala no es capaz de tomar esa decisión le pedimos a Carlos Mazón, como nuevo líder del PPCV que tome parte en esta crisis del bipartito y obligue a Barcala afrontar este grave problema de gobernabilidad en la ciudad de Alicante”.
En esta línea, Rafa Mas, ha incidido en sus declaraciones, al respecto de la urgente necesidad de quitarle a Llopis sus competencias de gobierno, al menos en Educación y Servicios Sociales "la paralización del Edificant, el bloqueo a la retirada del fibrocemento de los colegios, la renuncia a las actividades extraescolares, la gestión autoritaria y profundamente sectaria del Patronato de Escuelas Infantiles, la renuncia o la incapacidad de dar respuesta a la emergencia social actual que se vive en muchos barrios de la ciudad , son motivos más que suficientes para que Barcala actúe y ponga fin a una gestión marcada por el sectarismo ideológico y la incapacidad de atender a las necesidades de las familias y las infraestructuras educativas y sociales. No es tolerable que el PP de Barcala y Mazón sigan mirando hacia otro lado y dejen que sus socios ultras asuman la defensa de una gestión que cada día que pasa se hace más insoportable y dolorosa para la mayoría de la ciudadanía alicantina”.
