Xàbia implica a asociaciones, centros de salud, farmacias y urbanizaciones en el proyecto Radars que lucha contra la soledad
La concejala de Servicios Sociales de Xàbia, Pepa Gisbert, ha avanzado algunos de los pasos que se están dando dentro "Radars", el programa comunitario con el que el municipio busca luchar contra la soledad de los mayores y prevenir que la falta de apoyo derive en situaciones de riesgo o abandono. Este pretende que todos tomen un papel activo y se conviertan en "radares" que detecten situaciones de soledad en ancianos y adviertan a la Administración, que buscará recursos para que vivan en condiciones de bienestar, dignidad y seguridad.
El proyecto se presentó en diciembre y ha tenido gran acogida. "Radars ha sido como una llamada. Desde el primer día hemos recibido avisos de personas que podían estar en precario (sobre todo extranjeros ya muy mayores y que no tienen familia aquí) y que necesitan que les hagamos un seguimiento o en casos más graves que busquemos a su familia, una residencia o les llevamos al hospital" ha explicado Gisbert.
Desde Servicios Sociales se están llevando a cabo ahora una serie de reuniones con colectivos que pueden tener un acceso más fácil a estas personas: desde asociaciones con carácter social al personal que trabaja en centros de salud o farmacias para explicarles cómo actuar en el caso de que detecten situaciones que puedan derivar en soledad (que hayan perdido a su pareja, una red familiar débil, alguna enfermedad discapacitante o precariedad económica).
También se están cumpliendo los trámites para dar cobertura a los voluntarios que se han presentado para contribuir por ejemplo, generando un vínculo de confianza y compañía con la persona mayor e invitándola a participar de las actividades comunitarias que tienen lugar en su entorno más próximo (para participar u obtener más información se puede contactar llamando al 965794142 (extensión 3818) o vía e mail a radarseniors@xabia.es ) y firmado un convenio con el Ayuntamiento de Barcelona, pionero en este modelo de intervención.
El próximo paso será presentarlo a las comunidades de residentes en urbanizaciones, donde ya se han repartido folletos informativos avanzando los rasgos básicos del programa ya que el vecindario es clave a la hora de detectar los casos en un término municipal que tiene miles de viviendas en diseminado y en el que viven personas con problemas con el idioma.
