El antiguo convento de Agustinos de San Pedro y Santa Marta vuelve a verse en la Plaza de la Generalitat
El concejal de Cultura del consistorio vilero, Pepe Lloret, ha explicado que “los restos arqueológicos encontrados en las catas pertenecen a un muro de cierre, que llama la atención por su grosor, dado que en el momento de la construcción del convento los muros se construían a modo de fortaleza para protegerse de las invasiones berberiscas del momento”.
Bajo la carretera general, a la altura de la plaza de la Generalitat, se han hallado, además, restos del pavimento del patio interior del convento. Sobre este suelo empedrado los técnicos del Servicio Municipal de Arqueología han encontrado una pequeña pieza de bronce que ya se está restaurando y catalogando.
El Convento de San Pedro y Santa Marta pertenecía a la Orden de los Agustinos Descalzos y estuvo en funcionamiento desde la fecha de su construcción, en 1607, hasta 1936, momento en el que se derribó para dar paso a la construcción de la carretera N-332.
Este convento acogía las actividades propias de los monjes agustinos así como las veces de hospicio para pobres y moribundos; además, desde el Servicio Municipal de Arqueología y Etnografía se ha informado que también hizo las veces de prisión y de escuela para los hijos de las familias más adineradas de la zona.
Este convento fue el hogar durante años del Beato Fray Posidonio Mayor (La Vila Joiosa 1582- 1633) a quien se considera un santo y se le atribuyeron curaciones milagrosas y el don de la profecía.
