Vila-real aprueba la eliminación de la depuradora Vora Riu
El Ayuntamiento de Vila-real ha aprobado por unanimidad en el pleno ordinario la eliminación de la depuradora Vora Riu para garantizar el futuro del tratamiento de las aguas residuales de la ciudad. Se trata de un acuerdo de cooperación para la ejecución de infraestructuras de saneamiento y depuración entre la Generalitat Valenciana, la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (EPSAR) y los ayuntamientos de Almassora y Vila-real, que permitirá eliminar la antigua infraestructura y conectar las aguas residuales de la ciudad a la estación depuradora del municipio vecino, "más moderna, avanzada, actualmente infrautilizada y con capacidad de sobra para atender ambas ciudades", tal y como explica el edil de Territorio, Emilio Obiol.
El responsable recuerda que la conocida como EDAR Vora Riu se construyó en 1978 y "desde entonces y hasta la actualidad ha presentado numerosos problemas, que no tienen solución, y que nos han llegado a costar hasta 90.000 euros al año, en concepto de canon de vertidos". Además, recuerda que "desde 1995 existe la depuradora mancomunada de Onda, Betxí y les Alqueries –en la zona sur- y cuatro años después se creó la de Almassora -al norte- y, teniendo estas opciones, hemos tenido que aguantar desde 2003 promesas de la anterior Generalitat para ampliar y mejorar nuestra estación, que no han pasado de ser una utopía y que se han quedado en papel mojado".
"Este equipo de gobierno y la nueva Generalitat dejan de lado las promesas y van directos a los hechos", indica, "y gracias a las gestiones realizadas, los problemas de la EDAR pasarán a la historia". "Se trata de dignificar nuestra ciudad desde la perspectiva de la depuración de las aguas mediante un proyecto que contará con una inversión de 2,3 millones de euros más IVA y con 7.000 euros para expropiaciones, que las hará el consistorio, de manera que damos respuesta a una problemática medioambiental y asegurando las perspectivas de crecimiento de futuro de la ciudad", afirma Obiol.
Por otro lado, el pleno también ha aprobado las tablas retributivas del área de Recursos Humanos tras la entrada en vigor de la LPE-2018 y ha dado luz verde al programa de fiestas de la Mare de Déu de Gràcia. Asimismo, la corporación municipal ha aprobado un expediente de suplementos de crédito financiado con remanentes por valor de 1.067.000 euros y otro de créditos extraordinarios de 450.117 euros.
La concejala de Hacienda, Sabina Escrig, ha explicado que el primero de ellos servirá para suplementar partidas de las diferentes áreas, así como para el Plan de Transporte Urbano, entre otros proyectos, como la ampliación del convenio para las obras del coro de la basílica de San Pascual y el de la Unió Musical La Lira. El segundo expediente cuenta con aportaciones para Joventut Antoniana y la Fundación Caixa Rural y su cooperativa, con motivo de la celebración de sus respectivos centenarios; para proyectos con la Escuela de Arte Superior de Diseño de Valencia; para la ampliación del centro de AFA, y para la rehabilitación del edificio de los antiguos juzgados para instalar las áreas de Tesorería y Promoción Económica, que permitirán que Comisiones Obreras se traslade a las dependencias que actualmente ocupa Tesorería. "Seguimos demostrando nuestra apuesta por la alianza con la sociedad", apunta Escrig. "No hay gastos faraónicos ni grandes inauguraciones, porque pensamos en el servicio a los ciudadanos", concluye.
