Vila-real pospone las actividades extraescolares en los colegios en solidaridad con la comunidad educativa local

El Ayuntamiento de Vila-real pospondrá todas las actividades extraescolares previstas en las próximas semanas “en solidaridad con los centros educativos de la ciudad por la difícil situación que están viviendo a consecuencia de los impagos del Consell”. El concejal de Cultura, Alberto Ibáñez, y la concejala de Educación, Rosario Royo, han dado a conocer hoy la decisión adoptada por el equipo de gobierno ante la gravedad de la situación en el sector educativo local, una decisión que ha sido “consensuada” con los centros docentes del municipio y que responde también al hecho de que “muchos colegios nos habían comunicado ya que no participarían en las actividades por las circunstancias en las que se encuentran”, señala el edil Alberto Ibáñez.

“Creemos en la igualdad de oportunidades en la educación y por eso nos parecía mal que aquellos colegios que por culpa de la Generalitat Valenciana, que por culpa del Gobierno del Partido Popular, no van a hacer actividades extraescolares porque no pueden permitirse ese lujo, no las hagan, mientras que otros colegios, por ser privados o por encontrarse en otras circunstancias, sí puedan hacerlas”, señala el concejal, quien insiste en que se ha tomado esta decisión “porque no estamos a favor de que haya niños de primera y niños de segunda”. “Creemos que la educación ha de ser igual para todos”, concluye el responsable de Cultura.

Por su parte, la concejala de Educación ha recordado que la Generalitat adeuda a los centros públicos dos cuatrimestres de gastos de mantenimiento, además de las becas, e insta al Consell a que “cumpla con su deber” con los colegios.

Algunas de las actividades que se verán afectadas por esta decisión son el pleno escolar que tenía previsto celebrarse en febrero, el Día del Árbol, las actividades de visita al auditorio o un nuevo ciclo de cine que Cultura iba a poner en marcha próximamente en colaboración con el instituto Francesc Tàrrega. En todo caso, Ibáñez asegura que se intentará suplir este tipo de programación “llevando las actividades y la cultura a los barrios”, de tal manera que se está valorando la posibilidad de contrarrestar la falta de actividades para los niños en los colegios con otro tipo de actividades en la calle y otras sedes sociales.

Tanto Ibáñez como Royo han incidido en el apoyo que desde el equipo de gobierno se está brindando a la comunidad educativa local y han lamentado que la educación pública esté pagando “la fiesta y los excesos de cuatro, que no pagarán la crisis”. Fruto de este apoyo explícito al sector educativo es esta nueva decisión del equipo de gobierno, que supone posponer la organización de actividades en los colegios “hasta que la Generalitat ponga fin a esta situación y los colegios vuelvan a demandarlas”.