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Vila-real concurre a ser ciudad innovadora con el objetivo de que en 2020 el 30% de la producción local proceda de la innovación

Vila-real concurre a ser ciudad innovadora con el objetivo de que en 2020 el 30% de la producción local  proceda de la innovación
  • El alcalde, José Benlloch, y el presidente de la Fundación Globalis dan a conocer el proyecto con el que Vila-real opta a ser Ciudad de la Ciencia y la Innovación y a diversificar la economía local

El alcalde de Vilar-real, José Benlloch, y el presidente de la Fundación Globalis, Dionís Mulet, han presentado hoy el proyecto con el que la ciudad de Vila-real concurre a la convocatoria del Ministerio de Ciencia e Innovación para obtener la distinción de Ciudad de la Ciencia y la Innovación, una marca que, según Benlloch, constituirá “un antes y un después” para la población y a partir de la cual se pretende que en el horizonte del año 2020 cerca de un 30% de la producción local de Vila-real esté vinculada a la innovación.

“Es un proyecto muy importante para nuestra ciudad y estoy convencido que va constituir un antes y un después para Vila-real”, señala el alcalde, quien vincula la importancia de esta iniciativa a los efectos de la crisis y el desempleo en la ciudad. “Tenemos tasas inaceptables de paro y 6.000 desempleados para los que hay dar soluciones desde todos los ámbitos”, apunta.

Con este objetivo, el equipo de gobierno encargó a la Fundación Globalis la redacción de un proyecto con el que optar a la marca de Ciudad de la Ciencia y la Innovación, una distinción que por el momento tan solo ostentan tres poblaciones en la Comunitat Valenciana –Valencia ciudad y las localidades alicantinas de Benilloba y Gata de Gorgos- con la que se reconoce el compromiso de la Administración local por renovar el modelo productivo y por la innovación.

“Si Vila-real consiguiera esta marca”, añade Benlloch, “nos permitiría identificarnos como una ciudad que mira hacia el futuro y nos permitiría empezar un camino nuevo”, que pasa en cualquier caso por “diversificar” la economía para hacer frente al hecho de que la cerámica y la construcción ya no van a poder reabsorber la destrucción de empleo generada por la crisis económica en los últimos años.

“Las infraestructuras de la ciudad y el potencial de la gente y su talento van a hacer posible que esa diversificación económica se produzca. Y para ello debemos poner en valor nuestra gente, nuestro talento, nuestras infraestructuras y nuestra posibilidad de generar un proyecto basado en la innovación que nos lleve a que en el horizonte del 2020 podamos tener cerca de un 30% de nuestra producción local basada en la innovación, que aproveche también los ámbitos del deporte, la salud y la cultura”, explica Benlloch. Los viveros de empresas, el Hospital de la Plana, el Centro de Tecnificación Deportiva, la administración electrónica o el futuro Espai Comercial la Vila constituyen algunos de los argumentos de la apuesta del equipo de gobierno por este modelo de innovación.

Por su parte, el presidente de la Fundación Globalis ha agradecido a toda la corporación local que haya apoyado sin fisuras la iniciativa porque “emprender este camino”, señala, “es una cuestión de todos”. Respecto al trabajo realizado por la entidad para optar a la marca gubernamental, Dionís Mulet señala que se ha realizado un plan estratégico en convergencia con la Unión Europa de cara a 2020, un “reto” a ocho años vista para el cual se plantean una serie de objetivos y acciones a desplegar “para que en 2020 la situación en Vila-real sea la mejor posible”.

“Innovación no quiere decir olvidar los sectores tradicionales, aunque sí darles las claves para un cambio de mentalidad”, señala Mulet, quien insiste en que este cambio de actitud debe imbricarse en la cultura local desde todas las etapas y ámbitos de la vida en la ciudad. La implantación de “la cultura básica de la innovación” es, de hecho, uno de los ejes del proyecto de Globalis para poner a Vila-real en el camino de la innovación y la tecnología. Al respecto, el presidente de la fundación apunta que lograr la marca del Ministerio de Ciencia e Innovación “no sólo nos permitiría tener una proyección internacional sino que también nos dará ventajas para poder optar a albergar nuevos espacios tecnológicos, de innovación de investigación” en el futuro.

Otro de los aspectos de la candidatura que se remite al Gobierno es el apoyo que la iniciativa ha logrado de todas las instituciones, empresas, sociedad civil y partidos políticos, a los que también se les pide su adhesión explícita al proyecto. Al respecto, el alcalde de Vila-real ha agradecido los signos de apoyo recibidos, entre ellos el recabado hoy mismo del presidente de la Diputación, Javier Moliner. En próximos días, además, se elaborará una declaración institucional para que el pleno de Vila-real muestre también su apoyo a la candidatura.

El alcalde ha anunciado también la convocatoria de una presentación pública del proyecto en un plazo aproximado de 15 días “para que la sociedad de Vila-real no solo conozca la iniciativa sino que, sobre todo, pueda implicarse en ella”.

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