El equipo de gobierno de Vila-real congelará en 2012 la contribución para que los vecinos no paguen más impuestos

El Ayuntamiento de Vila-real congelará el próximo año el recibo del Impuesto de Bienes Inmuebles de los vila-realenses para reducir en la medida de las posibilidades la presión fiscal sobre los ciudadanos “en unos momentos en los que muchos vecinos y vecinas están sufriendo graves dificultades económicas”. Así lo ha anunciado esta mañana el alcalde de Vila-real, José Benlloch, quien ha recordado que este es uno de los compromisos del equipo de gobierno con la ciudadanía, al que se da ya cumplimiento de forma prioritaria. Para conseguir esta congelación de la contribución, el equipo de gobierno planteará una reducción de cinco puntos, del 0,65 al 0,60, en el tipo impositivo que aplica el Ayuntamiento en el IBI. 

“Congelar los impuestos es uno de los nuestros compromisos electorales y del pacto de gobierno; ya dijimos que lo haríamos apenas tuviésemos posibilidad y los vamos a hacer”, incide el alcalde. La modificación, explica, se incluirá en la ordenanza fiscal que se aprobará probablemente en el pleno ordinario de septiembre, con el objetivo de que entre en vigor a partir de enero de 2012. Al respecto, Benlloch ha recordado que los recibos de contribución que se han cobrado este verano habían sido aprobados y aplicados por el anterior equipo de gobierno, sin posibilidad alguna de actuación por parte del actual ejecutivo municipal.

En este sentido, el alcalde ha recordado que en el anterior legislatura, a la que corresponden aún los recibos aplicados este año, el Partido Popular incrementó la presión impositiva sobre los ciudadanos entre un 12 y un 15% cada año durante los cuatro años del mandato municipal, como consecuencia de la revisión catastral realizada el año 2005, cuando los valores de la vivienda estaban muy por encima de los que tienen ahora. Esta revisión, añade, impuso un incremento de la contribución del 10% cada año durante los 10 años posteriores a aquella actualización, “sin que el anterior equipo de gobierno lo recurriera”. Esta circunstancia, argumenta el alcalde, hace que “si no reducimos el tipo impositivo que puede variar el Ayuntamiento de una manera contundente, como vamos a hacer ahora, no se puede compensar la subida impuesta por la revisión catastral”.

“Se trata de hacer números para que al final lo que los vecinos y vecinas de Vila-real paguen de contribución en el año 2012 sea lo mismo que lo que han pagado este año. Y esa es la propuesta que tenemos encima la mesa, la de congelar el IBI a partir de enero”, señala el primer edil. Para hacerlo, “hemos hecho los estudios técnicos correspondientes y las datos que tenemos indican que debemos reducir el tipo del 0,65 al 0,6014 con el objetivo de que el año que viene el recibo que pagan los ciudadanos sea el mismo”. “Por tanto, este equipo de gobierno no va a subir los impuestos”, concluye.

Benlloch ha valorado también la importancia de tomar esta decisión sobre todo en “momentos de dificultades económicas muy importantes como el actual, en el que hay muchas familias y muchas empresas de la ciudad que lo están pasando mal y no podemos seguir grabando a estas familias y empresas, sobre todo con un impuesto como el del IBI que es el menos justo de los impuestos, porque grava la vivienda, que es un derecho constitucional de todos”.