El acusado de matar a su pareja asume la autoría pero asegura que se encontraba "fuera de sí"
El juicio oral contra I.J.L.B, teniente de la Guardia Civil en la reserva, ha comenzado hoy en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Castellón.
Los hechos ocurrieron el 17 de julio de 2007 cuando el procesado inició una discusión con María del Carmen Pos, con quien convivía en Vila-real y con quien mantenía una relación sentimental desde meses antes.
Según el relato del fiscal, la discusión fue subiendo de tono hasta que, con el propósito de acabar con la vida de la mujer, el acusado le propinó varios golpes en la cara que hicieron que ella sangrara por la nariz.
Posteriormente la lanzó al suelo y se colocó a horcajadas sobre su tronco para impedir sus movimientos, le fracturó las costillas y le apretó fuertemente el cuello hasta que le produjo muerte por asfixia.
El acusado se aseó, se vistió y comunicó por teléfono a la Policía Local de Vila-real que creía haber matado a su pareja, y esperó en su casa la llegada de los agentes.
Durante su declaración, en la que únicamente ha respondido a las preguntas del Ministerio Fiscal y del abogado de la defensa, I.J.L.B ha asegurado no recordar cómo dio muerte a su pareja, pero ha dicho que los hechos se sucedieron tal y como los relata el Fiscal en sus escrito, porque "así consta en los atestados".
El acusado ha explicado que ese día tenía previsto viajar con su pareja a Madrid para encontrase con su hermana, y que comenzó a discutir con la fallecida cuando ésta le dijo que prefería que viajara solo, algo que él interpretó como un "preludio de abandono".
I.J.L.B ha definido su relación con la fallecida como "muy buena" y ha dicho que nunca antes había discutido con la mujer, a quien ha dicho que "quería mucho" porque era una "buena mujer, limpia, trabajadora y buena compañera".
El acusado ha subrayado que en la época en que sucedieron los hechos "estaba bajo medicación, tenía mucho estrés, mucha ansiedad y estaba en un estado de agitación muy alto", aunque ha dicho que tres días antes de matar a su pareja dejó de tomar la medicación por recomendación de "algunos amigos", lo que, según ha dicho, le provocó que perdiera el juicio y diera muerte a su compañera.
Los agentes de la Policía Nacional que acudieron al domicilio han testificado que el acusado estaba "tranquilo", e incluso una de ellas ha asegurado que "en ningún momento estaba alterado ni nervioso".
El Ministerio Fiscal y la acusación del Ministerio de Igualdad solicitan una pena de 14 años de prisión por un delito de homicidio, con el agravante de parentesco y atenuante de confesión, además de una indemnización de 24.000 euros para cada uno de los tres hijos mayores de edad de la víctima y de 36.000 euros para el hijo menor de edad.
La acusación particular de los tres hijos mayores solicita una pena de 20 años de prisión por un delito de asesinato y una indemnización de 150.000 euros para cada hijo, mientras que la acusación del hijo menor de la víctima reclama 15 años por un delito de homicidio y una indemnización de 180.000 euros para su defendido.
El abogado de la defensa ha solicitado una pena de 5 años de prisión por un delito de homicidio en el que concurre la agravante de parentesco y las circunstancias atenuantes de confesión, trastorno mental y reparación del daño.
