San Vicente incorpora en las principales paradas del autobús urbano e interurbano pantallas indicadoras del tiempo de espera
De forma experimental se han instalado dos dispositivos en las marquesinas de la calle Alicante y Universidad en dirección a la capital
La empresa concesionaria del servicio de transporte urbano e interurbano de San Vicente del Raspeig ha instalado pantallas indicadoras del tiempo de llegada de los autobuses del servicio interurbano y del urbano de forma experimental en las paradas de la calle Alicante y Universidad en sentido a la capital. Ambos dispositivos se alimentan con energía solar y ofrecen los tiempos de espera a los usuarios.
El concejal de Infraestructuras, Servicios y Mantenimiento, Rafael Lillo, ha explicado que “la empresa concesionaria del servicio urbano e interurbano ha instalado estas dos pantallas de forma experimental, siguiendo el modelo implantado en la capital de la provincia, y que mejora la información a los usuarios del servicio de transporte público al conocer los tiempos de espera para la llegada de los diferentes autobuses de las líneas del municipio y las que conectan con Alicante y la comarca”.
Los nuevos soportes permiten además acceder a toda la información sobre las paradas de las diferentes líneas que pasan por el punto en cuestión en los populares ‘termómetros’ en los que se muestra el recorrido íntegro de cada línea. Lillo “se ha empezado a instalar de forma experimental estas pantallas en las dos paradas que más usuarios registran”, al tiempo que ha destacado las mejoras introducidas en los últimos meses en el transporte del autobús urbano e interurbano mejorando la señalización e información.
Bus urbano
El concejal delegado del área ha recordado que un total de 48.028 viajeros utilizaron el servicio de autobús urbano de San Vicente del Raspeig durante el año pasado, lo que supuso 7.068 usuarios más que en 2011 y un aumento superior al 17% consecuencia directa de la reorganización de las líneas y la mejora de los sistemas de información de los usuarios.
El concejal del área ha destacado que el transporte urbano fue utilizado durante el año pasado por 48.028 viajeros frente a los 40.960 de 2011, es decir 7.068 usuarios más y un incremento del 17,2%. La línea que experimentó un mayor aumento fue la 45, con 5.999 pasajeros más, que es la más utilizada por los ciudadanos. La línea 46A registró 1.001 usuarios más mientras que la 46B se mantuvo en términos similares al año anterior con 18 viajeros menos.
Tres líneas urbanas
Lillo ha hecho énfasis en el buen funcionamiento de la línea 45, que es la que más usuarios registra y que cubre la zona suroeste del municipio entre Girasoles, Santa Isabel, El Tubo y Los Manchegos. Ésta alcanzó el año pasado los 34.095 usuarios, con un incremento de 5.999 pasajeros respecto al mismo periodo del año anterior, lo que supone un aumento del 21%.
La línea 46A, que atiende a los barrios de la zona norte, Pozo San Antonio y Villamontes, registró en 2011 un total de 10.768 viajeros, 1.001 más que el año anterior y un incremento del 10%.
Finalmente, se produjo una ligera caída en el número de pasajeros en la línea 46B, que cubre el polígono industrial Canastell y el diseminado de Pla Contxeta, que fue utilizada por 2.992 usuarios, 18 menos que en 2011, lo que representa una caída del 0,6%. Lillo ha recordado que ésta es la única línea que no se ha modificado y que habrá que seguir trabajando para optimizar su uso.
Nuevas paradas
El concejal de Infraestructuras, Servicios y Mantenimiento ha explicado que entre las causas de los buenos resultados de las líneas de autobús urbano está la ampliación del número de paradas, fundamentalmente en los barrios de Villamontes, que ha pasado de dos a cinco, a las que se añadieron otras cinco en Sol y Luz y Santa Isabel.
