Bienestar Social ayuda a las familias con miembros con diversidad funcional o enfermedad mental a mejorar el clima de convivencia

Con el objetivo de mejorar el clima familiar, para lograr una buena convivencia en aquellos hogares que cuentan con algún miembro con diversidad funcional o con una enfermedad mental, la Concejalía de Bienestar Social ha puesto en marcha esta semana el programa de intervención en el que participan una decena de vecinos de San Vicente del Raspeig. El edil del área, David Navarro, ha explicado que esta actuación consiste en informar, formar y apoyar a las familias y a los cuidadores principales, "para que mejoren su calidad de vida a través de una intervención especializada a nivel individual y grupal".

El programa, de nueva creación, contempla una doble vía de intervención. Por un lado, se realizan visitas domiciliarias individualizadas en las que se abordan aspectos concretos de la dinámica familiar para mejorarla, como la asunción de compromisos de todos los miembros (padres, madres, hijos, abuelos etc.), la identificación de las resistencias familiares así como acompañamientos para realizar gestiones diversas, como ir al banco, al médico o a realizar algún trámite administrativo.

Y, por otro lado, se trabaja en grupo donde se transmiten conocimientos y habilidades que les sirve a los participantes a ser más competentes en el manejo de los problemas que les son propios. Igualmente, se desarrolla un aspecto muy importante en la relación personal como es la ayuda mutua y la creación de redes de apoyo.

Este programa, dirigido por el equipo base de los Servicios Sociales municipales y un Educador Familiar, tiene una duración de seis meses.