El Centro Ocupacional Maigmó incorpora la terapia con perros en la atención a discapacitados intelectuales y autistas

El Centro Ocupacional Maigmó de San Vicente del Raspeig ha incorporado una nueva terapia asistida con perros en la atención a las personas con discapacidad intelectual severa y autistas usuarias de estas instalaciones. Este programa terapéutico, financiado por el Ayuntamiento, se ha puesto en marcha con el fin de mejorar la comunicación emocional y la afectividad y fomentar la responsabilidad de los beneficiarios.

La concejala de Bienestar Social, María Ángeles Genovés, ha visitado el centro para conocer el funcionamiento de esta terapia y ha destacado que “ya se está aplicando con éxito entre los usuarios del Centro Ocupacional Maigmó, que reciben la visita de un educador canino dos días a la semana para desarrollar este programa junto a los responsables del centro”.

Genovés ha añadido que “los resultados están siendo muy positivos, por lo que no descartamos la posibilidad de ampliar esta terapia a otros colectivos dado que también se utiliza en la atención a personas mayores, dependientes o con algún grado de discapacidad física o intelectual”.

La edil del área ha detallado que “el programa, que tiene una duración inicial de tres meses, se está desarrollando en colaboración con Dogsfriend, una empresa especializada en perros de alerta médica y servicio que coopera con diversas asociaciones y fundaciones de carácter social y que utiliza canes y otros animales con fines terapéuticos”.

Entre los beneficios de la terapia con perros destaca la disminución del sentimiento de soledad y aislamiento que pueden sufrir las personas autistas o con discapacidad intelectual, además de favorecer el intercambio afectivo a través del animal ya que dan y reciben cariño, lo que mejora las relaciones personales tanto entre los residentes del centro como entre ellos y sus cuidadores.

Otros beneficios
Asimismo, el perro se llega a convertir en canalizador de conversaciones entre los propios usuarios del centro y entre ellos y sus cuidadores, lo que en el caso del Centro Ocupacional Maigmó se ha traducido en una mejora significativa de algunos de los beneficiarios que padecen autismo o falta de integración.

Además, la terapia con perros también aporta una serie de beneficios de carácter físico, ya que el simple hecho de acariciar al animal provoca un relajamiento y la consiguiente disminución de la presión arterial, además de requerir de una actitud activa por parte del usuario.

La concejala de Bienestar Social ha afirmado que “durante la última visita al Centro Ocupacional Maigmó hemos comprobado en primera persona los efectos positivos que esta terapia con perros está teniendo entre los usuarios con discapacidad intelectual severa y autismo”. Genovés ha agradecido “la dedicación y el esfuerzo que realizan los profesionales de este centro inaugurado hace trece años por la Conselleria de Bienestar Social y que actualmente gestiona la asociación de padres y familiares de discapacitados del Maigmó”.