Vicent Soler celebra "el cambio de actitud de la UE respecto a la Comunitat Valenciana que ha recibido 50 millones extra para empleo juvenil"

El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, ha celebrado este lunes "el cambio de actitud de la Unión Europea respecto a la Comunitat Valenciana. A diferencia de lo que ocurría en la anterior etapa, el trabajo que estamos llevando desde el Consell de gestión de los fondos europeos se valora positivamente en las instituciones y ya hemos empezado a ver los resultados".

Soler ha recordado que el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, con el aval de la Comisión Europea y habida cuenta del alto grado de ejecución que presenta la Comunitat Valenciana del Programa Operativo del Fondo Social Europeo de Empleo Juvenil (POEJ), ha decidido un aumento de la asignación de la ayuda gestionada por el Consell de 50 millones de euros, tal y como anunció recientemente el president de la Generalitat, Ximo Puig.

"Cuando llegamos al gobierno estábamos a la cola en ejecución de fondos europeos. Además, las auditorias e inspecciones que se llevaban a cabo desde Europa y que afectaban a la gestión del anterior ejecutivo nos llevaba a sufrir constantes minoraciones en muchos de los proyectos que se habían financiado con estos fondos, por no cumplir con las reglas del juego. Ahora nos sentimos satisfechos de mirar atrás y ver cómo han cambiado las cosas. Somos conscientes de que nos queda mucho por hacer y que nuestro esfuerzo debe ser constante, pero la evolución en estos últimos años nos llena de satisfacción", ha afirmado Soler.

"Además, con nuestro trabajo y actitud estamos levantando poco a poco la hipoteca reputacional que pesaba sobre la Comunitat Valenciana en Europa. Los anteriores dirigentes llevaron a cabo procedimientos irregulares que hicieron que la actuación de la Generalitat quedara bajo un velo generalizado de sospecha, algo que nos estamos esforzando por reparar", ha añadido el conseller.

Vicent Soler ha realizado estas declaraciones durante su participación en la jornada 'Debate con la Ciudadanía sobre el Futuro de Europa y de la Política de Cohesión', organizada por la Conselleria de Hacienda y Modelo Económico que ha tenido lugar este lunes en la Facultat d'Economia de la Universitat de València.

Durante la jornada se ha celebrado un debate en el que han participado además del conseller de Hacienda, el director general de Fondos Europeos, Andreu Iranzo; el secretario general de UGT-PV, Ismael Sáez; el coordinador territorial de la Comissió Espanyola d'Ajuda al Refugiat del País Valencià, Jaume Durà, i el catedrático y director del Centro de Documentación Europea de la Universitat de València, Cecilio Tamarit.

El futuro de Europa

Vicent Soler ha señalado que "Europa vive un momento de reflexión de cómo y hacia dónde avanzar. En estos momentos, la Unión Europea no puede limitarse a ser la guardiana de la unidad de mercado, de la libre competencia, de la ortodoxia presupuestaria y de la unión monetaria. Es necesario avanzar hacia la concepción de una Europa más social que garantice el bienestar de los ciudadanos. Sin política social, no hay Europa", ha sentenciado el conseller.

"Las políticas de cohesión son un pilar básico de Europa. La Unión Europea debe ofrecer en materia de servicios básicos una garantía subsidiaria a la que ya ofrecen los Estados, pero al mismo tiempo una garantía real que funcione en los momentos en que sea necesario. Porque ninguna unión aduanera y económica puede sostenerse de manera democrática sin instrumentos de redistribución de la riqueza", ha señalado el conseller de Hacienda.

"¿Cómo debemos financiar los europeos el Estado del Bienestar?", se ha preguntado Soler. "Evidentemente, siendo competitivos en este mundo globalizado que nos ha tocado vivir", ha señalado el conseller de Hacienda, quien ha añadido que tras la unión bancaria y la armonización fiscal, "la UE afronta el reto de dar una solución a la competitividad con Asia, asumiendo la realidad de que Europa es, sobre todo un mundo de pequeñas y medianas empresas".

El conseller de Hacienda se ha lamentado de que "la realidad es la que es. Europa no se ve, está demasiado difuminada. Hay demasiada dispersión y estamos obligados a volcar los esfuerzos en edificar más y mejor Europa" y ha añadido que "los ciudadanos europeos debemos querer a Europa y fortalecerla para evitar situaciones como la ocurrida en el Reino Unido". En este sentido, ha apuntado que "son los jóvenes los que mejor están ejerciendo esa responsabilidad, ya que aprecian la libertad y las oportunidades que les ofrece la Unión Europa en un mundo globalizado".

La mesa redonda ha arrancado con la intervención del catedrático y director del Centro de Documentación Europea de la Universitat de València, Cecilio Tamarit, quien ha expuesto que "Europa debe decidir cuál es el camino que debe emprender". "Es evidente -ha añadido Tamarit- que en el proceso de la construcción de Europa estamos a medio camino y en ese déficit de la construcción europea se ha hecho fuerte la idea populista de que Europa no resuelve los problemas de la gente".

Por su parte, el secretario general de UGT-PV, Ismael Sáez, se ha lamentado de que Europa "no ha sabido reaccionar en la defensa del Bienestar Social, tras haberse instalado el pensamiento único, impuesto por las grandes multinacionales, de que la única salida, después de la última gran crisis, pasa por bajar los impuestos y reducir los derechos de los trabajadores". "¿Cuánto estamos dispuestos a perder para que ganen los demás?", se ha preguntado el secretario general de UGT-PV. Saiz ha remarcado la importancia de las elecciones europeas del próximo 26 de mayo y ha señalado la trascendencia de definir de forma clara "quién manda en Europa".

Asimismo, el coordinador territorial de la Comissió Espanyola d'Ajuda al Refugiat del País Valencià, Jaume Durà, ha intervenido en el debate para poner el dedo en la llaga de la problemática creada por la falta de una política común europea en materia de inmigración, que pueda ayudar a desmontar la falacia esgrimida por los partidos populistas de extrema derecha acerca de la entrada de refugiados en Europa.

"Estamos ante el mayor éxodo forzado de personas de la historia, pero de los 70 millones de refugiados, el 90% lo son en países en vías de desarrollo y sólo una mínima parte de ellos llega a Europa", ha señalado Durà, quien ha añadido que "las cifras desmienten la argumentación del aumento de la llegada de refugiados a Europa".

"Es justo todo lo contrario -asegura Durà-, en 2015 llegó al continente europeo más de un millón de personas, que se redujeron a 363.000 en 2016, fueron 171.000 en 2017 y el año pasado bajó aún más la cifra para situarse en 144.000 personas". El coordinador territorial de la Comissió Espanyola d'Ajuda al Refugiat del País Valencià ha reclamado a Europa un esfuerzo para consensuar las políticas de inmigración, estableciendo vías seguras y legales para los afectados".