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Valencia reúne a los principales expertos en enfermedades infecciosas

    La directora general de Salud Pública de la conselleria de Sanitat, Lourdes Monge, ha inaugurado esta tarde el XVIII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica, que se celebra desde hoy y hasta el día 11 de abril en el Palacio de Congresos de Valencia.

    Se estima que cerca de 1.500 profesionales pasarán por este encuentro, organizado por la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) para tratar las principales novedades en esta materia, con la expectativa de convertirse en punto de reunión para discusión y transmisión de conocimiento.

    Durante los tres días, expertos debatirán sobre aspectos como los brotes infecciosos y las epidemias, las enfermedades importadas y los patógenos especiales, o las nuevas tecnologías y biomarcadores en el diagnóstico y tratamiento de este tipo de patologías.

    La directora ha querido destacar durante la inauguración que "hace no tantos años parecía que las enfermedades infecciosas habían dejado de ser un problema de salud pública; los avances científicos junto al desarrollo económico y social llevaron a cierto optimismo, y en la década de los 60 algunos textos científicos llegaron a considerar que las principales enfermedades infecciosas podrían desaparecer en un tiempo razonable. Sin embargo, la transición a enfermedades crónicas no llegó a cerrarse completamente, y desde hace 30 años estamos siendo testigos de nuevas y viejas amenazas en la salud global".

    El crecimiento demográfico exponencial, la incursión en zonas antes deshabitadas, la rápida urbanización con la aparición de las megaciudades, las prácticas agrícolas intensivas, el deterioro del medio ambiente y el mal uso de los antimicrobianos "han supuesto una gran transformación mundial en un breve espacio de tiempo, que han roto el equilibrio en el mundo de los microorganismos", ha añadido.

    La globalización, además, "ha traído un mundo interdependiente e interconectado, en continuo movimiento; solo el tráfico aéreo mueve más de 2.500 millones de personas año, lo que añadido al volumen del comercio internacional ofrece innumerables oportunidades para la rápida diseminación de microorganismos y sus vectores".

    Como consecuencia, los expertos están identificando nuevas enfermedades "a un ritmo vertiginoso" que conllevan cambios importantes para la salud humana y algunas amenazas para la salud global. Hoy en día existen al menos 40 enfermedades que se desconocían una generación atrás.

    A las enfermedades emergentes, hay que añadir nuevos problemas relacionados con las resistencias a los antimicrobianos. En este contexto, "es razonable que el control de las enfermedades transmisibles se configure como un elemento estratégico de los modernos sistemas de salud pública, -ha señalado Lourdes Monge. Dicho control se plantea desde dos elementos clave: la detección precoz y una respuesta rápida. "Para ello es imprescindible la participación de los profesionales de la clínica, la microbiología y la medicina preventiva. Necesitamos por lo tanto reforzar los sistemas de vigilancia con un abordaje multidisciplinar".

    En nuestra Comunidad, esta andadura se realiza desde hace 10 años, a partir del trabajo coordinado entre los microbiólogos y los epidemiólogos. Concretamente, la Red Valenciana de Vigilancia Microbiológica, RedMIVa, permite disponer, prácticamente de forma inmediata, de la información necesaria para proporcionar la respuesta adecuada en función de los problemas detectados.

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