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Valencia instalará contenedores para reciclar el aceite de cocina, altamente contaminante

Valencia instalará contenedores para reciclar el aceite de cocina, altamente contaminante
  • Se prevé instalar 266 contenedores metálicos de aceite de uso doméstico en todos los barrios y pueblos de Valencia

Con un presupuesto base de licitación de 247.931,78 euros (sin IVA) el Ayuntamiento de València ha licitado el contrato para instalar un mínimo de 266 contenedores metálicos de aceite de uso doméstico en todos los barrios y pueblos de València. En 2020 la ciudad de València recogió a través de sus 95 contenedores un total de 29,8 toneladas de aceite doméstico, que equivalen a aproximadamente 37.250 litros de aceite. “Así que el margen de mejora, con los nuevos contenedores situados directamente en la vía pública, será muy grande”, ha destacado el vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo.

El contrato tiene como objetivo la instalación de contenedores de aceite de uso doméstico en todos los barrios y pueblos de València. Tal y como ha explicado el vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, “hasta ahora teníamos muchos contenedores en edificios públicos, pero esto limitaba el horario en el que la gente podía usarlos. Han sido las vecinas y vecinos los que nos pidieron que instaláramos este tipo de contenedores en la calle y esperamos que en pocos meses estén disponibles”. Este proyecto tiene su origen en la participación ciudadana dentro de la edición de presupuestos participativos de 2019-2020 y desde entonces se ha estado trabajando en el contrato, la licitación del cual se ha publicado hoy.

Los contenedores que serán antivandálicos y antirrobo contarán con un sistema de retención de líquidos antiderrames con capacidad de al menos seis litros. Constarán de dos partes, el exterior que será metálica con capacidad para depositar el aceite en botellas de plástico de hasta cinco litros y la parte interior que podrá consistir en una cubeta metálica o en un contenedor de polietileno de alta densidad, dependiendo de lo que considere más adecuado el servicio de Gestión Sostenible de Residuos Urbanos y Limpieza del Espacio Público. Además, en estos contenedores se colocará información sobre el reciclaje de aceite doméstico y otras informaciones importantes para la correcta gestión de los residuos por parte de los vecinos y vecinas.

En total serán 266 contenedores los que se distribuirán por los barrios y los pueblos de València, y que convivirán con los que están ubicados en los edificios públicos, y con los ecoparques fijos y móviles del Ayuntamiento de València y de la Entidad Metropolitana del Tratamiento de Residuos (EMTRE). El objetivo es facilitar el reciclaje del aceite de cocina, tal como ha explicado Sergi Campillo, “el aceite es altamente contaminante y no se debe tirar por los desagües de casa, tenemos que tener en cuenta que es muy difícil de eliminar cuando se hacen los procesos de depuración del agua y, por lo tanto, lo que hay que hacer siempre, es reciclarlo”. Según algunos estudios, un único litro de aceite puede llegar a contaminar 40.000 litros de agua. Además, se puede usar como biocombustible si se gestiona adecuadamente.

“Hasta ahora teníamos 95 contenedores para la recogida de aceite doméstico, situados en varios edificios municipales, lo que dificultaba su visibilidad dado además que estos edificios tienen horarios y no son accesibles a cualquier hora. Por eso era muy importante tener contenedores en la vía pública. En 2020 la ciudad de València recogió a través de sus 95 contenedores un total de 29,8 toneladas de aceite doméstico, que equivalen a aproximadamente 37.250 litros de aceite. Así que el margen de mejora, con los más de 250 nuevos contenedores situados directamente en la vía pública, será muy grande”, ha destacado el vicealcalde.

El aceite doméstico recogido por el Ayuntamiento de València es transportado a las plantas de la Entidad Metropolitana para el Tratamiento de Residuos (EMTRE) donde es gestionado para su venta como subproducto para su conversión en biodiésel. “Con este contrato cumplimos la petición ciudadana a través de los presupuestos participativos y además, ayudamos a mejorar la gestión ambiental de un residuo muy contaminante”, ha concluido Sergi Campillo.

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