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El sector de las antigüedades sigue dormido en Valencia pese al volumen de negocio que genera en España

    Pese a que el coleccionismo y la recuperación de piezas antiguas están de moda en Europa la tradición por las antigüedades en la Comunidad Valenciana es más bien escasa. El mercado del arte y antigüedades en España está integrado por casi 4.000 negocios, emplea a cerca de 12.000 personas (el 90% de las cuales en el sector de galerías) y da empleo a una amplia variedad de negocios auxiliares, muchos de los cuales son nichos de servicios especializados que sin este mercado no existirían. Sin embargo estas cifras engañan porque representa menos del 1% a nivel mundial.

    Además se constata un contraste brutal en España, entre la tradición artística –somos el segundo país del mundo en patrimonio artístico-, y la referida al coleccionismo. Tan sólo las grandes fortunas o nobleza han coleccionado de manera asidua a través del tiempo. La clase media no alcanza el nivel de la tradición anglosajona o francesa, así se desprende de la experiencia de expertos tasadores de arte y antigüedades, miembros de la Asociación de Peritos Colaboradores con la Administración de Justicia de la Comunidad Valenciana.

    "Existen numerosas familias en la Comunidad Valenciana propietarias de mobiliarios, lámparas o porcelanas que no le dan valor. No existe tradición histórica de reutilización de estos enseres o intercambio de los mismos en mercados tradicionales como ocurre en espacios como Camden Town en Londres, ni la existencia por tanto, de ferias de relevancia internacional como la de Antigüedades de Paris o la TEFAF de Maastricht. Aquí en el mejor de los casos los muebles acaban en el rastro," dice Javier Andreu, historiador del Arte y perito tasador en antigüedades.

    Pero qué entendemos por antigüedad. En este sentido nos recuerda que es cualquier pieza artística o decorativa que supera los cien años de edad y que posee cierto valor estético o histórico. Es importante la cantidad de años, pero también la calidad, los materiales y estilo de las piezas.

    Hasta hace muy poco los objetos que había en los desvanes y las casas de los abuelos eran sólo trastos viejos que acababan en la basura, en el rastro o recogidos por chatarreros que te cobraban por llevárselos. Si bien es cierto que hay quien cree que el tocador de la tía es un tesoro del XIX o una reminiscencia de Art Nouveau, muchos más los tiran porque no saben dónde ponerlos.

    ¿Cómo se sabe si el mueble que lleva años en casa de tu madre tiene un valor? ¿En qué consiste la pericia de antigüedades? "Consiste emitir un juicio objetivo sobre el calidad y valor económico de una obra. La tasación de una obra es una puesta en valor del patrimonio mueble porque da la posibilidad de conocer el valor artístico-económico de esta. Asimismo, el tener documentada y valorada una pieza es importante para aseguradoras, siniestros, robos y herencias," dice Aná Jordán Hernández, Perito tasador judicial licenciado en Historia del Arte y Bellas Bellas Artes. Pero ¿es caro este servicio? Javier Andreu recuerda que un informe que posibilite la puesta en valor de un objeto que con anterioridad no poseía ninguno, siempre será muy barato.

    Y ¿cómo se realiza?. Existen numerosos métodos de valoración y tasación económica. César Tello Garrido, historiador del arte y licenciado en Derecho, destaca entre los distintos métodos de tasación y valoración económica de obras de arte (determinísticos, aleatorios, genéticos, agregativos, espúreos, de simulación y empíricos), el método sintético o comparativo porque consigue determinar el valor con un menor margen porcentual de error. Este método se sirve de procedimientos matemáticos, estadísticos y de un amplio conocimiento del mercado de obras de arte de donde obtiene sus referencias. Y posibilita conocer con certeza, por ejemplo, el valor de una obra de arte heredada o el de una antigüedad que deseemos adquirir en un anticuario.

    Ferias

    Lo que llama la atención es el contraste entre la realidad de un mercado que vive de nuevo sus días de vacas gordas en Europa y el barómetro que mueven las antigüedades en la Comunidad. Este es un mercado que funciona cada vez más movido por los eventos. Las ferias de arte mueven la economía y la vinculan con otros sectores, como el turismo, para expandirla. Londres acoge ferias como la Masterpiece que aglutina más de 3.000 años de historia, lujo y diseño. París recientemente ha concluido su Bienal de Anticuarios considerada una de las mejores del mundo en su género.

    ARCO en Madrid aglutina visitantes de alto nivel que realizan desembolsos no solo en la feria sino en los demás servicios auxiliares. Por el contrario en Valencia la feria de antigüedades paso de ser un evento que congregaba a galeristas, coleccionistas, amateurs, autores… a dejar de celebrarse. Recientemente y durante dos ediciones Curiosity Antic pretendió despertar un sector aletargado por la crisis. Pero los bellos tesoros siguen atrincherados en el olvido mientras en otras ciudades españolas se recrean y exportan a otros países.

    A este dato hay que añadir que entre 2012 y 2013 la mitad de las tiendas de antigüedades en Valencia han echado el cierre. Sus espacios hoy lo ocupan tiendas de bicicletas, cafeterías o tiendas de moda. Apenas hay interés por las antigüedades porque falta cultura, conocimiento de la historia y escaso interés por el coleccionismo. "Cifras que no nos sorprenden al observar que la Comunidad Valenciana ocupa un nivel inferior a la media en el conjunto español en el interés por el mercado del arte y las antigüedades. Por el contrario Madrid, País Vasco, Barcelona o Santander destacan por su compromiso por el arte antiguo y contemporáneo. El arte por su propia naturaleza, sigue al dinero; pero ambos siguen a los incentivos fiscales, que son los que han convertido a algunas ciudades, (Nueva York, Hong Kong y Londres) en epicentros artísticos por excelencia", reflexiona Javier Andreu desde la Asociación de Peritos Colaboradores con la Administración de Justicia de la Comunidad Valenciana.

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