FGV organiza una nueva Metro-ruta para visitar el Museo de Bellas Artes San Pío V de Valencia
Los más pequeños han contemplado la cromática de los lienzos y los han relacionado con cartulinas de colores
Las obras seleccionadas eran de Sorolla, Pinazo, Cecilio Plá, Darío Regollos y Antonio Berneta
En esta Metro-ruta los más pequeños han visitado el museo conducidos por monitoras con las que han podido ver la exposición y realizar tareas participativas. Las actividades han pretendido introducir a los niños en el mundo del arte y conocer así los distintos colores que componen las obras.
Por ello, una de las actividades realizadas ha sido la de un taller didáctico, en el que las monitoras han repartido entre los niños cartulinas de los cuatro colores básicos (azul, rojo, amarillo, y negro). Con éstas se han llevado a cabo dos acciones: por una parte, los niños han superpuesto a estas cartulinas papeles de celofán para poder formar los colores secundarios y comprender a través de su propia experiencia cómo se crea esta gama de colores. Otra de las actividades, ha consistido en crear grupos de cada color, los niños estaban identificados con sus cartulinas y formaban por capas los colores del cuadro que estaban contemplando.
En los cinco lienzos preseleccionados predominaba la luz y el color, de los que tres de ellos trataban sobre paisajes y otros dos eran de figuración. Por tanto, los pequeños han analizado los colores de cada una de las obras y con sus muestras de cartulina han identificado los tonos con el cuadro. Por ejemplo, el azul con el cielo, el verde con los árboles y el marrón con la tierra.
“El Domingo Nanometro” es una propuesta cultural y de ocio, incluida en las actividades del Metro Club y desarrollada por Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV). Esta iniciativa tiene como objetivo convertir, los domingos, las estaciones de la red de Metrovalencia en un escenario de espectáculos y actuaciones para los más pequeños.
El arte valenciano
El siglo XIX, así como el siglo XX, conforman para el arte valenciano un periodo de fecunda producción por estar repleto de personalidades de primera magnitud que encontrarán eco en el panorama plástico del momento, calificado como “el nuevo Siglo de Oro de la pintura valenciana”. Entre algunos de los nombres más emblemáticos se encuentra, Ignacio Pinazo y Joaquín Sorolla.
Este conjunto de artistas con su peculiar forma de pintar, constituirán una escuela coherente y bien definida, que contribuye decisivamente a la renovación de las artes pictóricas españolas.
Su principal aportación estriba en la captación instantánea y lumínica de las cosas, desarrollando para ello una peculiar técnica de pequeñas pinceladas individualizadas y manchas de color.
