El Museu de Prehistòria de València prorroga la exposición de la Menorca talayótica
El Museu de Prehistòria de València, dependiente del Área de Cultura de la Diputación de Valencia, prorroga la exposición Arquitectura talayótica en la prehistoria de Menorca hasta el próximo 24 de septiembre.
Se trata de una propuesta con la que se intenta que el público aproveche este próximo mes para visitar la exposición, con la familia, o los amigos en el Centre Cultural La Beneficència.
El diputado de Cultura, Xavier Rius, ha manifestado que esta exposición, que podrá visitarse hasta finales del mes de septiembre, «es una gran oportunidad para conocer una cultura casi hermana porque, contemporáneamente, coincide con una parte sustancial de la cultura íbera, con su singular arquitectura talayótica, muy especialmente en Menorca».
De momento, la cantidad de público que ha visitado esta muestra pone de manifiesto su buena acogida, ya que desde su inauguración el pasado 16 de mayo y hasta la última semana de julio, han sido 3.759 las personas que han pasado a conocerla, ya sea a través de las visitas guiadas organizadas por el museo, por libre o participando en los diferentes talleres didácticos derivados de la propia exposición.
Destaca la presencia de público extranjero, sobre todo en lo referente a los visitantes italianos –representan una tercera parte–,seguidos de los ingleses y los provenientes de otros países europeos. También han pasado por la exposición personas naturales de China, Birmania, Australia, Canadá, Ucrania o Kazajstán, entre otras localizaciones.
Exposición de una cultura excepcional
La muestra que ya se ha expuesto en Alcalá de Henares e Ibiza presenta 66 objetos arqueológicos originales que provienen de los museos de Menorca y Ciutadella. Además, se acompaña de fotografías de los monumentos, ilustraciones que recrean su relación con el paisaje, así como de algunas maquetas que muestran los detalles morfológicos y constructivos de las diferentes tipologías arquitectónicas.
La arquitectura talayótica constituye un patrimonio arqueológico de valor universal excepcional por el uso de la técnica constructiva ciclópea, por su autenticidad, exclusividad, originalidad y singularidad en el marco cronológico en el que se desarrolla y por ser testimonio único de una sociedad prehistórica mediterránea insular.
Son monumentos que, a pesar de su antigüedad, destacan por conservarse en un muy buen estado, por su monumentalidad y el emplazamiento que ocupan, muy presentes en el paisaje menorquín. Además, también es excepcional su elevada concentración: la isla, con una superficie de 700 km2, tiene 1.574 yacimientos arqueológicos, de los cuales 1.401 están catalogados como Bien de Interés Cultural (BIC).
