Rehabilitación urbana y social para cicatrizar el Cabanyal
Los vecinos del Cabanyal esperan con optimismo los planes urbanísticos y sociales prometidos por el Ayuntamiento de Valencia
Dos cuestiones claves para regenerar este barrio emblemático y que deben ir de la mano, según los vecinos, para que la solución pueda ver al fin la luz
El Cabanyal avanza hacia su rehabilitación social y urbana. Un largo camino en el que se están dando pasos, como el último anuncio de la inversión de 15 millones de euros que recibirá de los Fondos Europeos, aunque no lo “suficientemente rápido” como sus vecinos reclaman.
A principios de esta semana se daba a conocer la inversión pública de 30 millones de euros, 15 procedentes de este proyecto europeo y 15 procedente del consistorio, que se destinarán a diferentes ámbitos sociales y urbanos en este barrio de Valencia. Una noticia que para sus vecinos es magnífica, tal y como reconoce Faustí Villora, representante de la Plataforma Salvem el Cabanyal, ya que muestra el “esfuerzo que tanto el equipo de gobierno como los técnicos han realizado” con las consultas ciudadanas para saber cuáles eran los puntos necesarios para revitalizar el barrio.
Una noticia que han recibido con alegría pero también con cautela. “Es importante recalcar que la inversión municipal tiene que ser independiente de la que va a recibir el Cabanyal del Plan Confianza de la Generalitat Valenciana”, recalca Villora, quien insiste en la importancia de separar ambas inversiones y espera que así lo haga también el equipo de gobierno de Joan Ribó: “El alcalde se ha comprometido a que así sea y esperamos que cumpla su promesa”.
Urgen medidas
Son muchas las asociaciones que ven el “esfuerzo” que el Ayuntamiento de Valencia está llevando a cabo para tratar de solucionar el problema que más urge en estos momentos y que se refiere a la convivencia ciudadana, aunque no con mucho éxito. “De momento todas las actividades políticas del nuevo equipo de gobierno han sido un fracaso y no han dado resultado. Problemas relacionados con los derechos a la intimidad y el descanso de los vecinos”, lamenta Villora y pone como ejemplo la ocupación de espacios públicos con actitudes que alteran la convivencia e impiden el descanso.
Problemas que deben solucionarse de forma urgente en la medida de lo posible “y de lo imposible”, insiste el representante de Salvem el Cabanyal. La idea, para Villora, es clara: “Las acciones sociales han de ir acompañadas de la rehabilitación urbana y viceversa”. Y por eso urge poner en marcha el mecanismo pero la burocracia está ralentizando todos los procesos, hecho que también reconocen y lamentan desde el consistorio valenciano.
“Hay obras que no empezarían hasta 2017 porque la redacción del proyecto no está ni siquiera encargada”, explica Faustí Villora. Proyectos como la urbanización de las calles San Pere, els Ángels y Lluís Espuch tras los cuales hay un “problema de temporalización”, según Villora, pues sin rehabilitación urbana no habrá regeneración social, dos lastres que arrastra este degradado barrio y que busca solventar lo antes posible. El Cabanyal quiere volver a ser el barrio marinero y referente que era, la puerta al mar de la ciudad.
