El Ayuntamiento renueva su convenio con la Asociación de Celiacos
El Ayuntamiento de Valencia y la Asociación de Celíacos de la Comunidad Valenciana han renovado su convenio de colaboración, vigente desde el año 2001. El convenio se centra en dos líneas de actuación: el control de calidad e idoneidad de los alimentos que forman parte de la dieta del celíaco por un lado y, por otro, el asesoramiento y colaboración para avanzar en la concienciación social acerca de las necesidades del colectivo.
En representación del Ayuntamiento han firmado el convenio las concejalas de Sanidad, Maite Girau, y de Medio Ambiente, Pilar Soriano, mientras que por la Asociación ha firmado su presidenta, Isabel Tejedor. La concejala Pilar Soriano ha subrayado la importancia de la coordinación entre departamentos para atender a las demandas del colectivo celiaco: "Desde la Delegación de Calidad Ambiental, mediante el trabajo coordinado del Laboratorio municipal con la Asociación Valenciana de Celiacos, apoyamos a la Delegación de Sanidad para poder garantizar la idoneidad de los productos sin gluten que se ofrezcan en el mercado”.
El convenio establece un plan de trabajo anual en el que se acuerda el tipo de productos y el número de muestras que se analizarán. Los análisis se centran principalmente en productos de panadería y bollería de pequeños elaboradores, ya que no disponen de un control de calidad, y son más susceptibles de sufrir contaminaciones cruzadas debido a que confeccionan también otros productos que sí contienen gluten. Entre el año 2001 y el 2016 se han realizado un total de 25 campañas, durante las que se han analizado más de 700 productos.
En cuanto a la vertiente de asesoramiento y colaboración, el Ayuntamiento ha participado en el Congreso Nacional y Conferencia Internacional celebrados en Valencia, organizados por la Federación de Asociaciones de Celiacos de España y coordinados por la Asociación de Celiacos de la Comunidad Valenciana. Asimismo, ha editado trípticos, posters y dossieres informativos para difundir un protocolo de buenas prácticas para la elaboración de productos de panadería y bollería aptos para los consumidores con intolerancia al gluten.
