Jardines de Monforte, el tesoro verde escondido en el centro de Valencia
En el centro de Valencia, muy cerca de Viveros, se esconde una auténtica joya de la ciudad. Los Jardines de Monforte son uno de los espacios verdes más desconocidos y recuperan, desde hoy, su acceso desde el palacete principal
Es el último jardín histórico y artístico del siglo XIX que queda en Valencia y, a pesar de ser una de las joyas verdes de la ciudad, no muchos ciudadanos han paseado por sus interminables caminos, han visitado sus bellas fuentes o se han sentado en alguno de los muchos bancos que se refugian bajo los grandes arboles históricos que lo conforman. Es el Jardín de Monforte, un espacio que se abre, desde hoy, aún más a sus vecinos.
El ayuntamiento de Valencia ha acondicionado el espacio para que a partir de ahora pueda accederse desde el Palacete de Monforte. Una entrada acorde a la categoría de este jardín, cuyo origen se remonta a un huerto existente en la zona de extramuros y que comenzó a tomar forma a mediados del siglo XX.
“Estamos de fiesta porque abrimos al público la entrada original del Palacio de Monforte”. Así celebra la corporación municipal este hecho y así lo comunicaba la concejal de Parques y Jardines, Pilar Soriano, durante la visita que ha realizado esta mañana a los jardines junto a la concejal de Patrimonio, Gloria Tello.
Ambas concejalías han participado en el acondicionamiento del espacio durante este verano, desde las fuentes y los juegos de agua hasta la entrada y accesos del palacete para que todas las personas puedan entrar sin problemas. “Es una acción que entra dentro de la dinámica de abrir a la ciudadanía los edificios municipales”, ha explicado Soriano, quien pone como ejemplo de este tipo de actuaciones la apertura a todos los valencianos del Ayuntamiento y el balcón del mismo.
Una idea que también defiende Gloria Tello ya que “es la forma de hacer política que entendemos”. “Nació por una demanda ciudadana y queremos que el patrimonio sea disfrutado por todos”, insiste la edil. “Es muy importante dignificar el espacio”, concluye Tello.
Los jardines ya estaban abiertos y lo que se ha hecho ahora es posibilitar su acceso a través de la entrada original, a través del Palacete de Monforte, en el que actualmente se celebran bodas. Y precisamente para evitar posibles conflictos, esta misma entrada se cerrará cada vez que se celebre una ceremonia aunque los jardines seguirán estando abiertos para todo el público. Asimismo, los ciudadanos no podrán acceder al primer piso del mismo, reservado para las ceremonias.
Son 12.000 metros cuadrados de verde, un espacio romántico y muy cuidado, con un acceso limitado para garantizar su mantenimiento. De hecho, no está permitido entrar con mascotas o bicicletas. El Jardín de Monforte contiene 33 estatuas de mármol, diferentes estanques, surtidores y muchas flores. Nenúfares, magnolios, laureles forman parte de esta vasta muestra de la cultura verde valenciana que fue abierta al público en 1972 y que, desde hoy, podrá ser más disfrutada por todo el que la visite.
