El Clínico realiza resonancias con vídeo incorporado para evitar la sedación en los niños

La Unidad de Resonancia Magnética del Hospital Clínico Universitario ha puesto en marcha una técnica que se emplea en muy pocos centros hospitalarios del mundo, consistente en incorporar un sistema de audio y vídeo en las resonancias magnéticas cerebrales en pacientes pediátricos.

Este sistema audiovisual -empleado para hacer las pruebas funcionales cerebrales- permite a los pequeños escuchar y visualizar proyecciones de vídeo mediante unas gafas especiales. Estas proyecciones les distraen permitiendo, en la mayoría de los casos, evitar la sedación.

Las ventajas son numerosas: se evita la sedación y sus potenciales complicaciones (depresión respiratoria, reacciones alérgicas a los fármacos, toxicidad medicamentosa, etc.), disminuye la percepción del ruido producido durante la prueba y se distrae al paciente disminuyendo su ansiedad, lo que consecuentemente aumenta su confort y el grado de satisfacción de sus familiares, y por último, se reduce el número de segundas citas.

El proceso de realización de la prueba
La cita del niño se realiza en un horario concreto, su edad ha de estar comprendida entre los 4 y los 12 años y no debe padecer un retraso psicomotor importante, ni problemas en la visión (patología orbitaria u oftalmológica). Para la realización de esta prueba es necesaria la autorización de los padres. En cada exploración, y atendiendo a las particularidades de la técnica y del paciente, será finalmente el criterio del personal sanitario el que establezca si la indicación es posible.

Respecto al personal de este servicio, está formado por 22 profesionales entre técnicos, enfermeros, radiólogos, el personal administrativo y el apoyo fundamental de los anestesistas.

Además, es importante señalar que el éxito con el que está contando este procedimiento ha hecho que se considere la posibilidad de aplicación en los adultos.

El estudio realizado en el Clínico y sus antecedentes
La resonancia magnética consiste en aplicar ondas de radiofrecuencia a un paciente colocado dentro de un campo magnético intenso. Las señales de radio emitidas por el paciente son captadas por un receptor y analizadas por un ordenador que las transformará en imágenes. Gracias a sus características no invasivas, a su inocuidad y a su alta calidad de imagen y precisión diagnóstica, se ha convertido en uno de los procedimientos de elección en la práctica clínica diaria.

Aún así, la resonancia magnética es un procedimiento que puede provocar en el paciente una situación de estrés debido a diversos factores tales como el desconocimiento de la prueba, el elevado tiempo de exploración y las características intrínsecas del imán (forma de túnel, ruido, etc.).

En un número elevado de casos (10-15%) se hace necesaria una anestesia sedativa ambulatoria para poder realizar correctamente la prueba, especialmente en pacientes pediátricos donde el porcentaje aumenta de forma considerable.

En España no hay referencia de un estudio previo similar. Con el realizado en la Unidad de Resonancia Magnética del Hospital Clínico Universitario de Valencia se pretende, por una parte analizar la relación entre el uso del sistema audiovisual y la disminución del número de pacientes que requieren de anestesia sedativa ambulatoria, y por otra, analizar la mejora de la calidad asistencial obtenida por la incorporación de este nuevo método.

Con este fin se está llevando a cabo una valoración de pacientes claustrofóbicos, diferenciando aquellos a los que se les explorado anteriormente con sedación, de otros que resultan claustrofóbicos ya desde la primera exploración y a quienes en ese mismo momento se les ofrece la proyección de una película evitando tener que darles una nueva cita.

Las conclusiones de este estudio serán publicadas a corto plazo, y sin duda reforzarán los excelentes resultados obtenidos hasta el momento.