El Ayuntamiento recibe del profesor Grisolía el conjunto de títulos, honores y reconocimientos que configuran su “Cursus Honorum”

“Asistimos hoy a un acto de la máxima generosidad y grandeza, de la mano de uno de los científicos más importantes con que cuenta nuestro país, el Profesor Santiago Grisolía, un valenciano de prestigio, que a través de este regalo demuestra el amor que siente por su tierra y por sus conciudadanos”. La Alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha agradecido hoy de esta manera la donación a la ciudad de Valencia, por parte del Profesor Santiago Grisolía y su esposa, Frances Lena Grisolía, de un juego de té decimonónico de plata sobredorada y 464 lotes de materiales, que conforman el “Cursus honorum” del prestigioso investigador.

Se trata de la colección de títulos, honores y reconocimientos que el Profesor ha recibido a lo largo de toda su carrera profesional que, a partir de hoy, pasa a formar parte del patrimonio histórico y cultural de todos los valencianos. De hecho, el interesante conjunto va a ser depositado en el Palacio de Cervelló, bajo la custodia del Servicio Municipal de Patrimonio Histórico, y se pretende poder exponerlo más adelante en el Museo Príncipe Felipe, junto al legado del Premio Nobel Severo Ochoa, que fuera maestro del profesor Grisolía.

Durante el acto oficial de donación, celebrado esta mañana en el Ayuntamiento con la presencia de la Concejala de Cultura, María Irene Beneyto, la Alcaldesa ha destacado cómo “pocas personas en nuestro país pueden presumir de poseer semejante colección de títulos, honores y reconocimientos de tantas y tan prestigiosas instituciones de todo el mundo, que –ha añadido- hacen aún más loable la generosidad con que el profesor Grisolía se desprende de ese preciado tesoro”.

En presencia del Secretario de la Corporación, se ha procedido a la firma del acta de donación, que incluye un compendio de fichas, en soporte informático y papel, en las que se detallan todos y cada uno de los premios, títulos, medallas, órdenes y reconocimientos donados. Rita Barberá ha expresado su “honor, como Alcaldesa de la ciudad, aceptar donaciones de personajes tan trascendentes para Valencia como es el caso del profesor Grisolía, para conocimiento de las generaciones futuras”.

De hecho, a lo largo del pasado año 2012, el Ayuntamiento ha recibido 7 donaciones de gran valor histórico y cultural, entre ellas, el cuadro “Aguas verdes”, del recientemente fallecido autor Francisco Sebastián, que está expuesto en el Museo de la Ciudad, o las piezas de bronce de la familia Álvarez de Toledo Gómez-Trénor, que se encuentran en el Museo Benlliure.

En este caso, la donación incluye un juego de té decimonónico, de plata sobredorada, que se presenta en su estuche original. Dicho estuche se compone de una caja de madera negra bruñida, con incrustaciones de filetes dorados en la tapa, que conforman dos rectángulos, uno dentro del otro, en cuyo centro se enmarca una chapa dorada con las iniciales C. B, es decir, las de Constanza Barrugueta, que fue su primera propietaria. El juego en sí se compone de las siguientes piezas: 12 cucharas a juego con dos marcas de acuñación (una cabeza con tocado mirando a la izquierda, y dos letras con una figura zoomorfa en medio); una cuchara de azúcar en forma de concha (con marcas de platero similares a las que presentan las 12 cucharas); un tenedor y cuchara a juego con el mango profusamente decorado con marca de platero; una pinza para azucarillos rematada con garras; y un colador con marca de platero en el interior, por debajo del borde.

“VOLCAR EN SU TIERRA MÉRITOS OBTENIDOS EN TODO EL MUNDO”
“Contemplar este magnífico legado nos permite acompañar al profesor Grisolía a lo largo de su brillante trayectoria profesional, la de una persona que ha entregado su vida al estudio, a la investigación, a la ciencia”, ha subrayado la Primera Edila. Barberá ha destacado “la excelencia que ha caracterizado la carrera de Santiago Grisolía”, desde que fue nombrado alumno interno numerario en la Facultad de Medicina de Valencia en 1943 (con una remuneración de mil pesetas) hasta hoy”. De hecho, la Alcaldesa ha subrayado cómo Grisolía “nacido en Valencia, quiso volver a su tierra en el momento de mayor reconocimiento profesional para volcar aquí sus grandes méritos, obtenidos por todo el mundo”

La trayectoria de este prestigioso investigador valenciano incluye reconocimientos como los títulos de Doctor Honoris Causa por 14 universidades, entre ellas, la Universidad de Florencia, Siena, Salamanca, Valencia o la Autónoma de Madrid. Además, ha recibido reconocimiento de colegios oficiales, de Universidades de todo el mundo, desde Kansas, para la que estuvo trabajando más de 41 años, hasta la Universidad de Zaragoza, Alicante, Valencia o País Vasco, entre otras.

Es académico de honor de prestigiosas instituciones como la Real Academia de Bélgica, las academias de Roma, Padua, Madrid, Galicia, País Vasco, Bilbao, Granada… etc. Posee la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio, la Gran Cruz de la Orden Civil del Mérito Agrícola, la Gran Cruz de la Orden Civil de Sanidad, la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil del Ministerio de Asuntos Exteriores y en 2010 los Ministerios de Ciencia y Educación le otorgaron la Medalla de Oro al Mérito de la Investigación y en la Educación Universitaria.

SU MEJOR TÍTULO, HIJO PREDILECTO DE VALENCIA
Cuenta en su haber con uno de los más prestigiosos premios que se otorgan en nuestro país, el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica que le fue entregado en 1990. Y ha sido también reconocido por parte de las principales instituciones valencianas: es miembro de la Academia de Bellas Artes de San Carlos, preside el Consell Valencià de Cultura, es miembro del Ateneo Mercantil de Valencia desde 1994, de la Orden de Jaume I el Conqueridor, y de la Fundación Premios Jaume I. Asimismo ha recibido el Premio a la Investigación Rey Jaime I en 1991, fue Premio al Mérito Cultural otorgado por la Generalitat Valenciana en 1998, posee por dos veces la Alta Distinción de la Generalitat Valenciana (1999 y 2007) y la medalla de Les Corts Valencianes desde 2007, entre otros muchos reconocimientos que le han llegado de fallas, fundaciones, colegios y otras asociaciones de carácter civil de la Comunidad Valenciana.

Además, desde 1976 es Hijo Predilecto de la ciudad de Valencia. De hecho, a las preguntas de los periodistas sobre cuál es el reconocimiento que le llena de mayor orgullo, ha respondido: “el título de Hijo Predilecto de Valencia”. Y ha añadido que fue este Ayuntamiento, precisamente, quien le otorgó su primer premio, cuando aún era estudiante, con motivo de una publicación científica.

En este contexto, el Profesor ha destacado la vocación del Ayuntamiento de Valencia en la promoción de la ciencia, y ha citado como ejemplo la creación del Premio Jaime I a las Nuevas Tecnologías, así como la convocatoria de las Becas Carmen y Severo Ochoa, de las que este año se cumple su 35 aniversario. Con tal motivo, tanto la Alcaldesa como el Profesor han expresado su deseo de reunir a los jóvenes científicos que en su día disfrutaron de esta ayuda para desarrollar su labor científica.

La Alcaldesa ha concluido el acto, señalando cómo la ciudad se une “a todos los reconocimientos al Profesor Grisolía, con admiración y respeto, desde la gratitud y el orgullo por que sea valenciano”.