Los monumentos falleros del 2020 deberán arder el próximo año
Es la realidad que contemplan desde la Junta Central Fallera
La suspensión de las fallas 2020 fue un duro golpe para el sector y especialmente para los artistas, quienes han visto como el trabajo de todo el año ha quedado relegado a los pabellones de Feria Valencia sin poder convertirse en foco de atención y finalmente arder de forma majestuosa ante la atenta mirada de todos los valencianos.
Ahora, en pleno verano y comenzando a dibujar el ejercicio fallero del próximo año, la duda sobre qué pasará con los ninots del pasado año que no tuvieron cremà sobrevuela el ambiente. Lo cierto ese que, tal y como reconocen desde Junta Central Fallera, no hay muchas opciones: habrá que quemarlos.
Una postura que comparten los artistas quienes desde un principio han reivindicado que la vida “útil” de sus obras es de lo que dure un ejercicio fallero. Es decir, descartan que se vuelvan a plantar el próximo mes de marzo.
Por su parte, el concejal y presidente de JCF, Carlos Galiana, ha reconocido que – pese a no tener la decisión tomada – este es el mejor de los planteamientos: “No va a haber plan B para las fallas 2023. Las fallas habrá que sacarlas y quemarlas como sea” afirmó durante la última reunión celebrada por el sector.
El cómo y el cuándo es un misterio, al igual que lo es el futuro de las fiestas josefinas. Su celebración y el modo en el que tendrán lugar queda determinado por la situación sanitaria que haya en España, y especialmente en la Comunitat Valenciana, el próximo mes de marzo.
