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La Luz de las Imágenes restaurará seis obras del Museo de BB.AA. de Valencia San Pío V

  • Los cuadros, de diferentes autores del XVII, recuperarán todo su esplendor

  • Destaca la pintura de Jerónimo Jacinto de Espinosa ‘El martirio de san Pedro de Verona’

La Luz de las Imágenes va a restaurar, en el Centro de Conservación situado en Bétera, seis lienzos pertenecientes a la colección estable del Museo de Bellas Artes de Valencia San Pío V. Los cuadros serán trasladados el próximo lunes 12 de septiembre.

Los cuadros, de diferentes autores del XVII, son en su mayoría de temática religiosa, a excepción del Retrato del rey Carlos II, que aparece representado como rey niño. Carlos II fue el último monarca de la casa de Austria, hijo y heredero de Felipe IV y Mariana de Austria, y fue nombrado rey a los cuatro años, aunque permaneció bajo la regencia de su madre hasta alcanzar la mayoría de edad.

Entre las obras que se trasladarán destaca la pintura de Jerónimo Jacinto de Espinosa El martirio de san Pedro de Verona. El artista, nacido en Cocentaina, se trasladó a Valencia, y si bien se formó con su padre, la influencia de Ribalta y Orrente fue decisiva para llegar a ser el maestro principal de la escuela valenciana del barroco español. En este cuadro, el pintor representa la muerte del famoso inquisidor dominico italiano del siglo XIII, también conocido como san Pedro Mártir y que destacó por sus dotes de oratoria y gran conocimiento de la Biblia.

Varios de estos cuadros todavía sufrían los daños provocados por el desbordamiento del río Turia en el año 1957, como el Santo Entierro de un seguidor de José de Ribera, en el que el carácter dramático del momento se resalta por el tenebrismo característico de la época, dirigiéndose el foco central de la luz a la figura de un Cristo en primer plano mientras el resto de personajes permanece en la oscuridad, o el San Francisco de Asís contemplando la redoma sagrada, obra de Vicente Vitoria, pasaje muy representado en el barroco español, realizado con gran colorido, hoy día oculto como consecuencia de la riada.

Estas dos últimas obras, así como el Retrato de fray Tomás Ramón en el acto de un rescate, de Casimiro Medina, pintor y sacerdote de fama en Valencia a principios del siglo XVIII, llegaron a la colección del Museo San Pío V tras la desamortización de Mendizábal. Del cuadro, que fue cortado en algún momento, solo se conserva la parte de la obra que se va a restaurar, en la que el fraile aparece representado como sacerdote de la Orden de Nuestra Señora de la Merced.

Entre los lienzos a restaurar se encuentra también una obra de Eugenio Cajés, la Presentación de Jesús en el templo, pintura de gran formato en la que la Virgen aparece de pie con el Niño en brazos, presentándolo al anciano Simeón, tocado con mitra, aunque nunca fue sumo sacerdote, y con las manos veladas en señal de respeto. Eugenio Cajés fue discípulo de su padre, pintor italiano, y llegó a afianzar su prestigio en la corte al ser nombrado pintor real de Felipe III en 1612.

Estas seis obras, gracias a los trabajos de restauración que se llevarán a cabo en los próximos meses, recuperarán todo su esplendor.

 

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