La hija del pintor Manaut dona un cuadro a la Casa Museo Blasco Ibáñez
Desde su nacimiento, el pintor se vio rodeado por un depurado ambiente cultural gracias a la amistad que unía a su padre, Manaut Nogués, con muchos de los intelectuales y artistas valencianos de principios de siglo, entre ellos Blasco Ibáñez, los Benlliure y Sorolla, grandes artistas de su tiempo que contribuyeron en su formación académica, hasta convertirse también en un destacado pintor.
Tal como comentará Vicente Igual, “la obra donada a la Casa Museo es un dibujo, hecho a lápiz, de la fachada del chalet, fechado en 1967. En ese tiempo el edificio, que había sido incautado tras la guerra civil y utilizado de 1942 a 1962 como Escuela de Flechas Navales, se encontraba en franco deterioro”. Este hecho queda reflejado en el pie que Manaut escribe de su puño y letra: ‘ruinas de la casa de Blasco Ibáñez en la playa de la Malva Rosa de Valencia’.
Desde entonces, explicará el Edil, el proceso de degradación fue imparable, y en 1980 la familia vendió el inmueble al Ayuntamiento, prácticamente destruido, hasta que en los años noventa, el Equipo de Gobierno actual lo reconstruyó, según los planos originales, inaugurándose como Casa Museo del escritor en 1997.
En este sentido, Vicente Igual informa que “gracias a esta labor de recuperación del patrimonio histórico, los valencianos pueden hoy conocer los objetos y recuerdos de Vicente Blasco Ibáñez, así como un amplio fondo documental de primeras ediciones y manuscritos”.
