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El General de Valencia amplía las actividades y la investigación en su programa de obesidad infantil

El General de Valencia amplía las actividades y la investigación en su programa de obesidad infantil
  • Muchos de los niños que han seguido el programa muestran una mejoría evidente

  • El Servicio de Pediatría tiene un proyecto nuevo de investigación para medir la capacidad aeróbica y el gasto metabólico en la valoración integral del niño y adolescente con sobrepeso

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El General de Valencia amplía las actividades y la investigación en su programa de obesidad infantil - (foto 2)
El Hospital General de Valencia está abordando el problema del niño obeso en colaboración con especialistas en educación física de la Universidad Cardenal Herrera-CEU. Así, se evalúa al niño obeso, se establece si tiene repercusiones orgánicas precoces, se interviene con consejos dietéticos y, además, se le diseña un programa de educación física. Sólo si el niño presenta comorbilidad (hipertensión arterial, alteración de los lípidos o alteración del manejo del azúcar) se trata específicamente.

El programa se ha reforzado con talleres de cocina saludable realizados en el propio hospital, orientados por un dietista y con la cooperación de Consum. Este programa se ofrece tanto para los niños como para sus familiares a través de sesiones teóricas y prácticas sobre comida sana y consejos sobre economía doméstica, ya que existen multitud de recetas que permiten disfrutar de una dieta adecuada sin renunciar a la buena cocina.

El hospital también está llevando a cabo un ciclo de talleres creativos y de expresión artística dirigido a niños con problemas de obesidad. De este modo, se contribuyen a liberar y manifestar sus emociones. Además de las actividades de pintura, los niños aprenden a trabajar con música y se les enseña a utilizar técnicas de relajación y respiración. La iniciativa, puesta en marcha por el Servicio de Pediatría y la Asociación Arco Iris Ríe, está respaldada por el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM).

Según Julio Álvarez, médico adjunto del Servicio de Pediatría, “la obesidad es un problema crónico y fundamentalmente de hábitos de vida poco saludables. Para cambiar esas costumbres de los niños se necesita una intervención controlada con un seguimiento del paciente bajo la supervisión de los pediatras”.

Las sesiones de ejercicio se realizan en el domicilio del paciente siguiendo un protocolo establecido. La intensidad de los ejercicios físicos empieza siendo baja y va aumentando progresivamente conforme se incrementa la condición física de cada niño.

Investigación: capacidad aeróbica y gasto metabólica
Ahora, además, el Servicio de Pediatría tiene un proyecto nuevo de investigación, junto con la Fundación Investigación Hospital General, para estudiar la utilidad de medir la capacidad aeróbica y el gasto metabólico en la valoración integral del niño y adolescente con sobrepeso. En este proyecto participan también el Laboratorio Labhuman, de la Universidad Politécnica de Valencia; los departamentos de Psicología Clínica de la Universitat de València y la Universidad Jaume Primer de Castellón y miembros de la Red Ciber de Obesidad y Nutrición.

Con este estudio tratamos de saber cuántas calorías consume el niño y la tolerancia que tiene a las pruebas físicas para establecer el ejercicio más adecuado para cada paciente”, apunta Isabel Torró, médico adjunto de Pediatría.

Este proyecto forma parte de las líneas de investigación del Servicio de Pediatría, de las que se derivan múltiples beneficios para el niño y el adolescente y cuya Unidad Contra el Riesgo Cardiovascular en Niños y Adolescentes es de referencia para toda la Comunidad Valenciana.

Según un reciente estudio del Ministerio de Sanidad, 1 de cada 5 niños entre 6 y 10 años presenta problemas de obesidad. El abordaje individual de cada niño es clave para obtener beneficios futuros en un problema de salud tan complejo como este.

Así pues, la finalidad del Programa Integral de Obesidad Infantil es reducir el porcentaje de grasa corporal; mejorar los problemas médicos asociados a la obesidad, como la hipertensión y la diabetes; promover un estilo de vida saludable y aumentar el bienestar psicológico y social del paciente.

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