La Filmoteca d’Estiu presenta este fin de semana la obra clásica ‘El hombre que pudo reinar’

Los aficionados al buen cine de aventuras están de enhorabuena. Este fin de semana la Filmoteca d’estiu ha programado “la más bella película de aventuras de todos los tiempos” (Maruja Torres), ‘El hombre que pudo reinar’. Se trata de una película de 1975, dirigida por John Huston, protagonizada por Sean Connery, Michael Caine, Christopher Plummer, Saeed Jaffrey y Shakira Caine en los papeles principales. Está basada en una historia corta de Rudyard Kipling. La película obtuvo cuatro nominaciones a los premios Óscar, al mejor guión adaptado, a la mejor dirección artística, al mejor vestuario, y al mejor montaje.

La historia se sitúa en la India de 1880. Dos soldados británicos viajan desde este país a Afganistán en busca de fortuna. En un pueblo de Kafiristán al que salvan de sus asaltantes, uno de ellos es nombrado rey. ‘El hombre que pudo reinar’ narra la historia de una amistad y de una época donde gran parte del mundo era todavía una incógnita y el romanticismo del peligro y lo que restaba por descubrir eran todavía posibles.

Una de las constantes en la carrera de John Huston ha sido su intuición para rodearse de buenos guionistas y un particular olfato y saber hacer casi mágico para adaptar obras literarias. El fin de semana pasado tuvimos ocasión de ver su adaptación cinematográfica de la imprescindible novela de Melville ‘Moby Dick’. En este filme Huston se ayudó de una colaboradora habitual, Gladys Hill, para escribir el guión. Todos los ingredientes del cine de aventuras se aúnan en esta película: acción, humor y drama se entremezclan para profundizar en la evolución de una amistad típicamente masculina que mantienen los personajes de Danny y Peachy. Un bello filme de aventuras, dirigido con la maestría de John Huston.

El ciclo ‘De aventuras y viajes’ reúne seis filmes dirigidos por grandes cineastas de la historia del cine que se aproximan, desde épocas, discursos e incluso géneros bien diferentes, al viaje entendido en tanto aventura, no sólo como desplazamiento físico sino también como trayecto vital repleto de peripecias.