Discapacitados de la residencia Pepe Alba, alumnos por un día de la escuela municipal de vela
La Fundación DASYC llevó el pasado sábado a un grupo de discapacitados físicos de la Residencia Pepe Alba de Valencia a una de las actividades de ocio y tiempo libre más esperadas por parte de sus residentes. El acto consistió en una visita a la Escuela Municipal de Vela, enclavada en uno de los escenarios turísticos por excelencia de Valencia como es la Marina Real, para participar en unas clases teóricas y prácticas sobre vela e integración ofrecidas por un técnico de la Federació d’Esports Adaptats de la Comunitat Valenciana y por el director de proyectos de Punto Cero Solidario, José Luis Maldonado.
Una demostración de navegación a vela llevada a cabo por un discapacitado físico de FESA a bordo de un GOS, barco adaptado para personas con discapacidad, servía para abrir la jornada en los pantalanes de la Escuela Municipal de Vela, que cedía posteriormente sus instalaciones para la proyección de un vídeo sobre vela adaptada y la realización de una charla sobre motivación personal y los valores inherentes a la navegación en un barco de vela como son el respeto, la autocrítica y la integración en el trabajo en equipo ofrecida a residentes, monitores y voluntarios de la Residencia Pepe Alba y de la Fundación DASYC respectivamente.
De vuelta a los pantalanes cerró la jornada una visita a la embarcación participante en los Juegos Paraolímpicos conocida como Sonar. Los discapacitados conocieron de cerca su funcionamiento e incluso se animaron a participar en algunas de las tareas de abordo como la recogida de las velas o la preparación del barco para salir a navegar.
Los participantes en el acto se mostraban entusiasmados por los conocimientos adquiridos y la oportunidad que les ofrecía Fundación DASYC de realizar una actividad de ocio totalmente nueva. “A nivel logístico y económico no es sencillo organizar o encontrar actividades adaptadas para discapacitados físicos todos los fines de semana. Por eso para ellos el hecho de poder salir y enfrentarse a una experiencia nueva como esta es siempre un momento inolvidable”, comentaba un voluntario de la Residencia Pepe Alba.
Finalizada la jornada todos los asistentes celebraron una comida de confraternización en la Marina Real disfrutando de la excelente climatología del fin de semana en Valencia.
