El Consorcio de Museos cierra el año con la exposición ‘La Interacción Plástica de Rodolfo Navarro’
La muestra incluye una parte del mural que expuso el artista valenciano el pasado año en la Gran Muralla de Pekín
La muestra, patrocinada por Bancaja y Torremar y que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Valencia, la presentará el secretario autonómico de Cultura, Rafa Miró, el próximo lunes, 21 de diciembre, y podrá contemplarse hasta el 17 de febrero de 2010. Contará con dos espacios expositivos, las Reales Atarazanas de Valencia y la Gran Vía Marqués del Túria.
La exposición, comisariada por Gonzalo de Zárate, se compone de una parte del mural que expuso el artista valenciano el pasado año en la Gran Muralla de Pekín, fotografías de sus 6 interacciones plásticas anteriores y 12 esculturas (2, 5 metros de altura), todo ello en las Atarazanas. Además, en la Gran Vía se colocarán 7 esculturas de 3,5 metros de altura.
Con la exposición de la parte central del cuadro expuesto en la Gran Muralla, INTERIOR… …EXTERNO (de 32 x 9 metros), y algunas secciones de menor tamaño, culmina un camino rico en experiencias y éxitos artísticos. La INTERACCIÓN PLÁSTICA toma el cuerpo del espacio de la sala de las Atarazanas, y con su resumen y trayectoria, descubrimos el proceso creativo de una idea diferente.
El carácter divulgativo y la necesidad de llegar a todos, son los principios que han ido formando el crisol de un concepto tan innovador como éste.
Haber realizado esta obra en la Gran Muralla de Pekín, en el paso de JuYong Guan, implica el triunfo de una idea y un claro intercambio entre dos culturas. Valencia y Pekín quedaron unidas por el lazo intangible del Arte en octubre de 2008, por la imaginación de un artista valenciano… por la inmensidad de la Gran Muralla China y un cuadro de mil metros cuadrados lleno de color.
En esta exposición en las Atarazanas de Valencia, podremos descubrir el proceso de una idea única e innovadora. Tras exponer en varias ciudades europeas los proyectos se tornaros realidades y los cuadros compitieron con ciudades y monumentos. Cuadros enteros que se fundían con el paisaje urbano, secciones expuestas en las salas de los museos, esculturas que competían con espacios abiertos… Y ahora, todo se reúne por primera vez en Valencia.
Un grupo de siete esculturas monumentales el la Gran Vía Marqués del Turia desafían el tráfico y los viandantes, los cuerpos negros imbricados se elevan como personas entrelazadas. Unas dependen de las otras y todas se necesitan para existir. Con sus 3,5 metros de altura se transforman en monolitos impactantes y serenos.
Experiencia en Pekín
La obra “Interior… …Externo” de 1000 m² estaba pintada con pintura acrílica, sobre una superficie especial, que posteriormente se montó sobre unos paneles de madera formando una gran obra única. Todo ello por piezas, algunas de grandes dimensiones, montadas en una gran estructura que preservaba intacta la Muralla, a través de un novedoso y complejo sistema desarrollado especialmente para el evento con el fin de no dañarla.
La composición se formaba por varios grupos de cuadros relacionados entre sí: cuatro cuadros principales de 6,25 m² y de una multitud de obras de menor tamaño que serán expuestas en la parte baja de la obra —cerca del suelo de la muralla— para que el espectador pueda percibirla a la altura de los ojos.
La exposición que se puede ver en Atarazanas repite los tres niveles de percepción que se buscaba La exposición posee tres niveles de percepción: La exposición en la Gran Muralla vista desde el suelo, la visión del conjunto desde lo alto de las montañas cercanas y la exposición de las obras recortadas que tendrá lugar después de esta muestra el próximo año en Valencia y que contará con el patrocinio del Consorcio de Museos de la Comunidad Valenciana.
Además la exposición del mural se acompañaba de 12 esculturas situadas delante de la obra, que creó el artista reproduciendo las mismas imágenes utilizadas en el mural. Se trataba de figuras geométricas de 2,5 metros de altura que ofrecen una visión tridimensional de las mismas que aparecen en el cuadro de forma que se presenta un mensaje más rico al espectador.
Biografía Rodolfo Navarro
Rodolfo Navarro es un artista valenciano (1966) que se ha caracterizado desde hace casi 20 años por su afán de llevar el Arte a todos los públicos y a todos los niveles. Exponiendo sus obras en los lugares más insólitos y extraordinarios de Europa. Fue en 1991 cuando en París colocó su primer cuadro —INTETRACCIÓN PLÁSTICA— bajo la Torre Eiffel para que el público lo disfrutara si límites. El Palacio de Fontainebleau en 1996, la ciudad de Wolfsburg en Alemania y su Museo de Arte moderno en 1997, Valencia en 2002, París en 2003 y China en 2008 han disfrutado de una nueva manera de entender el Arte y de mostrarlo a los demás.
Discípulo de Rafael Pérez Contel —uno de los grandes artistas valencianos del último siglo (IVAM 2006 y 2008)— Rodolfo Navarro tuvo una relación con su maestro como en lo mejor del Renacimiento; un aprendizaje sin igual que le llevó desde los 14 años a entrar en el mundo del Arte para nunca separarse de él.
Desde sus inicios, Rodolfo Navarro se ha caracterizado por huir de la técnica. Guiado por su maestro Rafael P. Contel, fue descubriendo que la verdadera libertad creativa consistía en no centrarse en ninguna de ellas, dominarlas todas y pasar de una a otra según lo requiera el momento, el lugar de ejecución o el espacio expositivo que recogerá su última idea creativa.
Sin darle mayor importancia al proceso de realización de la Obra, es la idea, su concepto y transmisión, lo que ha alimentado sus pasos y esas enormes ansias de comunicar con el publico. Como él siempre ha dicho: “La técnica es una herramienta más, como un martillo. Las ideas son los clavos.” Bajo este nuevo concepto descubrimos retratos, fotografías y esculturas; grandes instalaciones, grabados, libros ilustrados y novelas. La escritura parece arropar todos los tiempos idealistas, el lenguaje se convierte en su último martillo creativo.
