El cardenal Carlos Osoro y los tres obispos auxiliares de Madrid peregrinan a la capilla del Santo Cáliz

El arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro, sus tres obispos auxiliares y el Consejo Episcopal de Madrid peregrinaron este pasado fin de semana a la Catedral de Valencia donde obtuvieron la indulgencia plenaria del Año Jubilar Eucarístico del Santo Cáliz.

En su peregrinación a la Seo, la comitiva madrileña fue recibida por el arzobispo de Valencia, cardenal Antonio Cañizares, quien les acompañó en el recorrido por la Catedral y en la celebración que tuvo lugar en la capilla del Santo Cáliz y agradeció la visita y transmitió todo su cariño hacia la diócesis de Madrid.

Tras la celebración, en la que la comitiva obtuvo la indulgencia plenaria del Año Jubilar, el cardenal Osoro señaló que “es muy emotivo poder volver a Valencia y estar delante de la Sagrada Copa” y recordó sus años como Arzobispo en Valencia y “cuántos momentos he estado en la capilla rezando ante el Santo Cáliz y también hoy le he pedido al Señor poder dar la vida por Él, ahora en Madrid”.

Del mismo modo, el arzobispo de Madrid ha agradecido al cardenal Cañizares su “cariñoso recibimiento” y a toda la Iglesia en Valencia “el cuidado del Santo Cáliz que para el cristiano es tan importante”.

Igualmente, el cardenal Osoro ha recordado que fue él quien pidió a la Santa Sede que concediera un Año Jubilar del Santo Cáliz a Valencia “dejándolo como regalo a toda la diócesis” y aseguró que “pido al Señor por todos los valencianos que tantas cosas me habéis dado, quizás las mejores que tengo, gracias de corazón”.

La comitiva madrileña estuvo acompañada en su visita a la Catedral por el cardenal Cañizares, por al Vicario General y Deán, Vicente Fontestad, y por el canónigo celador del Santo Cáliz, Alvaro Almenar, quien además les mostró las instalaciones del Museo catedralicio así como la Santa Espina y el Lignum Crucis, las otras reliquias de la Pasión junto con el Santo Cáliz.

Además, antes de entrar en la Catedral la comitiva madrileña también visitó la Basílica de la Virgen de los Desamparados donde rezaron ante la imagen de la patrona de los valencianos.