Uno de cada cuatro jóvenes valencianos consume sustancias estupefacientes

La Fundación Arzobispo Miguel Roca-Proyecto Hombre Valencia ha alertado hoy sobre el “preocupante aumento del consumo de cannabis sintético entre los jóvenes valencianos, una sustancia química que causa una rápida adicción y un deterioro brutal que a los terapeutas les recuerda a la heroína”, según Vicent Andrés Martínez, director de la entidad.

En el grupo de adolescentes y jóvenes atendidos por Proyecto Hombre, con edades de entre los 12 y los 25 años, el 12,5 por ciento consume el cannabis sintético como sustancia principal y uno de cada cuatro, junto con otras como la marihuana, “dato referido a 2018 y que en 2019 ha crecido y ya podemos decir que son uno de cada tres”, ha advertido el director de la entidad en la presentación de la memoria de 2018.

El cannabis sintético es “una sustancia química que en Valencia ha comenzado a consumirse en el entorno de los centros de menores y por el perfil más joven, a diferencia de otros países europeos, donde el consumo es problemático en los centros penitenciarios”, según Vicent Andrés.

Asimismo, el servicio de acogida y asesoramiento de Proyecto Hombre atendió el año pasado a un total de 1.392 personas, “y un tercio de esas primeras atenciones estuvieron relacionadas con adicciones de jóvenes”, ha subrayado el director, que ha añadido que “son familias angustiadas que se acercan por temas como la marihuana, el abuso de las nuevas tecnologías, las apuestas deportivas y los juegos on line, y cuando vienen a nosotros es porque el problema empieza a ser ya de cierta envergadura”.

En la presentación de la memoria de 2018, el presidente delegado de la Fundación, Nacho Grande, ha incidido en el carácter “pionero” de la entidad cuando se puso en marcha en 1985 “centrada en la persona y su entorno para trabajar el problema de las adicciones desde una perspectiva global” y ha explicado que la entidad forma parte del área de fundaciones de Cáritas Diocesana de Valencia y atiende cada día a más de 300 personas con tratamiento y a sus familiares.

Igualmente, Grande ha apuntado como “preocupaciones” de Proyecto Hombre “la ausencia en la sociedad de percepción del riesgo por el abuso de determinadas sustancias, como el alcohol y el cannabis, así como el aumento de personas asistidas por adicciones comportamentales relacionadas con nuevas tecnologías y, cada vez más, de jóvenes con adicciones al mundo de las apuestas on line, sobre todo deportivas”.

Además, desde Proyecto Hombre han realizado un llamamiento a las Administraciones Públicas para que “continúen confiando en esta institución y que juntos repensemos el sistema de atención a las drogodependencias” además de demandar “un liderazgo político para incrementar la prevención y la atención de las nuevas necesidades” y han hecho una llamada a la sociedad “para que entiendan que el mundo de las adicciones es un riesgo y para que nos den su apoyo y colaboración ya que sólo un 16 por ciento de recursos propios y dependemos de las subvenciones públicas”.

En este sentido, Proyecto Hombre cuenta con un equipo formado por 133 voluntarios, “cuya labor es fundamental porque cualquier proceso de recuperación se hace en comunidad”, así como 51 trabajadores profesionales y 40 alumnos en prácticas.

Por su lado, José María Taberner, patrono de la Fundación y Vicario de Acción Caritativa y Social del Arzobispado, ha recordado que “en esta sociedad que vive con una permisividad generalizada siempre debemos proteger a los más vulnerables, como los adolescentes que caen en las adicciones y a los que se les trunca el futuro”.

El riesgo de los juegos on line: “Nos inunda la publicidad, no hay control”

Desde la institución también han alertado sobre “el descontrol en la publicidad de juegos on line, que nos ha inundado y que puede generar conductas adictivas, como constatamos en Proyecto Hombre, porque además para los jóvenes el acceso a las apuestas on line es muy fácil, especialmente deportivas”.

En 2018 iniciaron tratamiento en Proyecto Hombre Valencia un total de 859 personas a través de sus distintos programas, como los centros de día en Valencia, Gandia y Ontinyent, que dispensaron tratamiento ambulatorio a 484 personas; la comunidad terapéutica de Valencia, que ofreció un tratamiento intensivo a 215 personas; la comunidad intrapenitenciaria de Picassent (98); y el programa de jóvenes y adolescentes “con tratamiento para 62, algunos de ellos menores, y sus familias”.

Respecto a las mujeres, al igual que en ejercicios anteriores “continúan con dificultades para acceder al tratamiento, ya que representan sólo el 16 por ciento de atenciones, y la evolución del tratamiento es peor, por todo ello hemos puestos en marcha nuevas metodologías para ofrecerles un trato diferencial para intentar mejorar esta situación”.

Las sustancias de mayor consumo siguen siendo la cocaína, el alcohol y el cannabis, el perfil mayoritario de persona atendida es el de un varón, adulto, español, con edad media de 39 años, consumidor de cocaína, soltero y en paro.

Por último, desde la entidad han hecho hincapié sobre “las listas de espera para acceder a tratamiento por adicciones, de plazas públicas y privadas” y han recordado que el alcohol “es la droga legal más consumida en España, cuyo uso está normalizado en la sociedad, y suele estar asociado a otras adicciones”.