La Basílica de la Virgen de los Desamparados inicia la restauración de sus fachadas, tejado y órgano

La Basílica de la Virgen de los Desamparados ha iniciado una nueva fase de su restauración, que abarcará las fachadas y el tejado. Los trabajos no afectarán al culto diario en el templo y concluirán en diciembre de 2011 con la habilitación y apertura del Museo de la Virgen en la planta superior del edificio.

En la actualidad, se han instalado ya los andamios en la parte de la Basílica que recae a la plaza de la Almoina con el fin de iniciar la restauración en la fachada de ese lado y en la cubierta del templo, “cuyas tejas se encuentran muy deterioradas por el paso de los años, y que producen numerosas goteras y otros desperfectos en la parte superior del edificio”, según ha indicado a la agencia AVAN el rector de la Basílica, Juan Bautista Antón.

Concluida la restauración del tejado de la Basílica y de la fachada que recae a la Almoina, se iniciará la limpieza y repintado de la portada principal y de los tejados, que están “muy erosionados con el paso del tiempo”. Está previsto, además, que se instalen sistemas anti palomas en distintos lugares afectados por la presencia de estas aves.

Las obras del templo, erigido en 1667, están siendo financiadas por la Fundación para la Restauración de la Basílica, en la que “confluyen ayudas de los fieles y diversas subvenciones”, ha precisado el rector.

Por otra parte, las obras en el edificio anexo, que data del siglo XIX, iniciadas el pasado mes de octubre y que también concluirá a final de 2011, permitirán adecuar una nueva capilla penitencial. En ella serán ubicados cuatro confesionarios modernos así como salones para usos de la Basílica.

Asimismo, el edificio, que contará con más de ochocientos metros cuadrados de superficie construida entre sus tres pisos de altura además de la planta baja, albergará una sala para la vestición de los niños de la Escolanía de la Virgen, otra dependencia para guardar la imagen peregrina de la Mare de Déu dels Desamparats, donde será preparada y vestida por su camarera, así como espacios para “otros servicios de la Basílica y de la Archicofradía de la Virgen”.

De igual forma, las obras van a incluir la instalación de un ascensor, con el que los fieles con discapacidad podrán acceder a las plantas donde se ubiquen tanto el museo y el archivo, así como el confesionario y el camarín.

La restauración de la Basílica se completará después de diciembre de 2011, con una nueva fase que afectará al camarín, la sacristía y las dependencias superiores a la misma, que completarán el Museo de la Virgen. También se habilitará el archivo histórico de la Archicofradía, que quedará abierto al público, fundamentalmente a historiadores y estudiosos.

Restauración del órgano

Simultáneamente, este mes se ha iniciado la restauración del órgano de la Basílica, que se encontraba “muy deteriorado”. Los trabajos, subvencionados por la Diputación de Valencia, afectarán tanto a la consola como a la tubería, que serán restauradas y, en parte, renovadas”.

Provisionalmente, el órgano “ha sido sustituido por otro de reducidas dimensiones que funcionará mientras dure la restauración del primero”, ha explicado Antón.