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El Ayuntamiento quiere impulsar la apicultura urbana de autoconsumo en el término municipal de València

El Ayuntamiento quiere impulsar la apicultura urbana de autoconsumo en el término municipal de València
  • El vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, ha participado esta mañana en las actividades con motivo del Día Mundial de las Abejas

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El Ayuntamiento quiere impulsar la apicultura urbana de autoconsumo en el término municipal de València - (foto 2)
El Ayuntamiento quiere impulsar la apicultura urbana de autoconsumo en el término municipal de València - (foto 3)

El vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, ha anunciado esta mañana la iniciativa del Ayuntamiento para pedir una modificación legislativa autonómica que favorezca la extensión de la Apicultura Urbana. Campillo ha anunciado que dirigirá una carta a la Generalitat para promover un cambio legislativo para “fomentar esta estrategia y permitir también que se puedan instalar colmenas de manera segura en los ámbitos urbanos”, ha explicado.

El vicealcalde ha subrayado “los múltiples beneficios que aportan las abejas, tanto a humanos como al medio ambiente”, y ha destacado su papel “fundamental en la polinización y como agentes bioindicadores de la contaminación ambiental”. De hecho, según el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), más del 70% de los cultivos que proporcionan el 90% de lo que come la humanidad se poliniza gracias a las abejas. En Europa, cerca de un 84% de los cultivos vegetales comercializados y un 80% de las plantas en estado silvestre dependen de esta función, según la Comisión Europea.

Campillo ha participado esta mañana en las actividades que se celebran en la plaza del Ayuntamiento con motivo de la conmemoración del Día Mundial de las Abejas, que se celebra hoy. En colaboración con AVAU, Asociación Valenciana de Apicultura Urbana, el Ayuntamiento ha instalado un puesto informativo desde el que ha informado a la ciudadanía sobre los beneficios de las abejas. El vicealcalde, Sergi Campillo, acompañado por el presidente de AVAU, Raúl Escobedo, ha señalado que numerosas ciudades, como Londres o Ámsterdam “utilizan el mundo de las abejas como herramienta de educación ambiental, que ayuda niños y adultos a concienciarse de nuestra dependencia de los ecosistemas naturales, y de la necesidad de su protección y la difusión de la Apicultura Urbana”. “Por ello -ha añadido- y ante las numerosas experiencias que demuestran que no hay problemas de cohabitación, consideramos que hay razones suficientes que justifican la introducción de la Apicultura Urbana de autoconsumo en el término municipal de València”.

LA APICULTURA URBANA EN EL MUNDO

La drástica reducción de la población de abejas que se ha producido en las dos últimas décadas, tanto en Europa como en Estados Unidos, ha propiciado la aparición de proyectos de Apicultura Urbana en diferentes ciudades alrededor del mundo (movimiento Beekeeper). Y hoy en día, esta actividad, que arrancó en París, donde desde el siglo XIX estaba legislada, se ejerce en más de un centenar de ciudades, siendo Londres la actual capital de la apicultura urbana mundial.

En España, Barcelona es la ciudad pionera en la instalación de colmenas urbanas, mientras que en la Comunidad Valenciana, la normativa sobre apicultura está enfocada a la actividad agropecuaria y a las explotaciones apícolas. No obstante, desde el Ayuntamiento de València se ha instalado una veintena de colmenas en los últimos años, aunque la mayoría localizadas en zonas verdes, como los Jardines del Real (Parque de Viveros) o el Jardín del Túria, dado que la actual normativa impide aproximarlas a los núcleos habitados, o regula su ubicación de manera muy restrictiva (algunas colmenas se han instalado en edificios municipales de Ciutat Vella). Tal como ha recordado el vicealcalde, el Ayuntamiento colabora en la supervivencia de las abejas mediante estos panales, y recoge la miel, uno de los alimentos más completos que existen en la alimentación humana, que se regala a entidades de solidaridad.

“De hecho, recientemente hemos regalado toda la miel (unos 396 kg en 1835 puedes) producida en el año 2020 a 8 entidades sociales que trabajan con personas en riesgo de exclusión social para que pudieran usar esta miel en sus menús, o para repartirla entre las personas usuarias. En este sentido, la miel producida en las colmenas municipales ha acabado también siendo parte de la política que hace este gobierno a favor de los colectivos con especiales dificultades”, ha explicado el vicealcalde.

ORDENANZA MUNICIPAL SOBRE APICULTURA URBANA

En este sentido, desde el Ayuntamiento, a través de la Vicealcaldia y Concejalía de Ecología Urbana, se está estudiando la posibilidad de desarrollar una ordenanza propia de apicultura urbana que permita fomentar y desarrollar esta práctica con todas las garantías necesarias, regulando las condiciones de instalación de colmenas, su mantenimiento y el régimen jurídico de su funcionamiento. Pero, tal como ha explicado el vicealcalde, la normativa autonómica actual, sobre la que debería asentarse la ordenanza, ha quedado superada (no recoge ninguna habilitación a partir de la que poder elaborar esa ordenanza propia). Por eso, el Ayuntamiento pedirá a la Generalitat un cambio legislativo para fomentar esta estrategia y permitir que se puedan instalar por parte de particulares de manera segura, como pasa en muchas ciudades del mundo, ha concluido el vicealcalde.

 El objetivo, ha concluido el vicealcalde, es que “se permita a las ciudades desarrollar una verdadera red de colmenas urbanas”. “Las ciudades –ha subrayado Campillo- tenemos un papel fundamental a la hora de conservar esta especie animal, que es fundamental también para la propia supervivencia humana”.

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