Apabanc presentará 400 demandas por acciones de Bankia
La Asociación de Usuarios y Consumidores de productos financieros, Apabanc, ya ha presentado las primeras demandas acumuladas en los juzgados de Valencia. Apabanc estima que sólo en las próximas semanas irá acumulando demandas que representan a más de 400 afectados de toda España por la OPS de Bankia. “Por su parte Bankia continúa con la estrategia de desinformación de las últimas semanas, sin aclarar qué pasos dará en el caso de que finalmente se vea obligada a resarcir a los inversores minoristas que acudieron a la oferta de compra. Generar incertidumbre y plantear la duda de si devolverá su inversión a los afectados minoristas parece ser la confusa estrategia de Bankia –señala Ricard Torres, Presidente de Apabanc-, por eso consideramos que la vía de la demanda civil es la única que garantiza que los inversores puedan recuperar el 100% de su dinero”.
Las demandas acumuladas que Apabanc está presentando y que agrupan, cada una de ellas, a un número de entre 30 y 40 afectados, solicitan al juez la nulidad por error de vicio en el consentimiento porla transmisión de información falsa en el proceso de comercialización de las acciones. “Estamos solicitando también la acción de responsabilidad civil por falsedad del folleto informativo que emitió Bankia, derivada de artículo 28 de la Ley del Mercado de Valores, y por tanto la petición de devolución de la inversión al incumplir la entidad sus obligaciones” –explica Salvador Sastre, letrado de Apabanc, sobre el fundamento jurídico de las demandas.
La suscripción de acciones de Bankia se produjo por la creencia de que la entidad emisora ostentaba una buena situación patrimonial y estaba generando beneficios. Dicha creencia vino propiciada por la información engañosa plasmada por Bankia en los estados contables y en folleto informativo registrados con motivo del lanzamiento de su Oferta Pública. “Pero dichas cuentas no ofrecían una imagen fiel de su patrimonio. Venían además respaldadas por la auditora Deloitte que posteriormente ha sido sancionada por el Instituto de Contabilidad y Auditoria de Cuentas (ICAC) por su mala praxis en aquel informe” –recuerda Ricard Torres. El falseamiento de la imagen de Bankia se hizo mayor a través de las manifestaciones triunfalistas de sus directivos en los medios de comunicación y las recomendaciones de sus empleados en las conversaciones con sus clientes.
Para Salvador Sastre el hecho inequívoco es que Bankia “no cumplió su deber de informar con veracidad acerca de su situación financiera para que los inversores pudieran tomar sus decisiones económicas con un adecuado conocimiento de causa. De este modo, los suscriptores prestaron su consentimiento de forma errónea, como consecuencia de la situación de engaño causado por la actuación dolosa y desleal de la entidad emisora”.
