Solidaridad impulsa un plan para proteger a los menores separados de sus familias en Haití
Tras el terremoto de enero y los huracanes de 2008
En colaboración con Unicef, el Consell establecerá un campo de acción para prevenir el tráfico de menores que han quedado sin hogar o han perdido a sus familiares tras las últimas catástrofes. Con el terremoto, se ha incrementado el número de niños que acogen los orfanatos y las guarderías, además existe mayor riesgo de explotación infantil y se han disparado las cifras relativas a la infancia que vive en la calle.
Por estas razones, a los pequeños de Haití que han quedado solos también se les brindará apoyo psicosocial. Además, este proyecto, que la Conselleria de Solidaridad apoya con 183.709 euros, contempla el establecimiento de espacios seguros para la infancia.
En concreto, todos estos objetivos se alcanzarán con la intervención en tres ámbitos. Por una parte, se formará sobre temas de salud, nutrición e higiene a los agentes de protección de la infancia, mientras que también se favorecerá la educación de los pequeños. Así mismo, se mejorará la situación alimentaria de niños en situación de malnutrición grave. Posteriormente se hará un seguimiento para garantizar que los menores identificados como vulnerables sean quienes se beneficien realmente de los alimentos, los medicamentos y servicios de educación ofrecidos por el proyecto.
“La enfermedad o la muerte de sus progenitores, así como la inseguridad en que está sumido el país más pobre de América del Sur agravan la situación en que se encuentran muchos menores de Haití, por ello este proyecto es más que necesario”, ha señalado el titular de Solidaridad. Alrededor de 2.325 niños haitianos se vean beneficiados por este plan.
Rafael Blasco ha recordado el compromiso que mantiene la Comunitat Valenciana con Haití: “Primero colaboramos con la atención básica de la población y posteriormente, cuando surgió el brote de cólera, se ha enviado material médico y sanitario para evitar que esta enfermedad se extendiera más”.