Signes: “Camps ha realizado su recorte en infraestructuras por dejación, con ocultismo, sin publicidad y sin alternativas”

El diputado del Grupo Socialista en Les Corts y portavoz de Infraestructuras y Transporte, Francesc Signes, ha acusado al presidente Camps de “practicar grandes dosis de cinismo” al afirmar, en relación con las tres obras reprogramadas por Fomento en la Comunitat Valenciana, que “lo que hay que hacer en estos momentos es invertir”, cuando “es el Gobierno de España el que está manteniendo la licitaciones de obra pública en la Comunitat, frente al desplome inversor en infraestructuras por parte de la Generalitat”.

Signes ha afirmado que “Fomento ha tenido el valor y el sentido común de plantear una necesaria reprogramación de la obra pública, con criterios, prioridades y alternativas”, mientras que el Consell “simplemente ha optado por dejar de efectuar sus previsiones para 2009 y reducir en los presupuestos de 2010 un 35% sus proyectos en infraestructuras con ocultismo y sin publicidad”, tal y como “vienen denunciando los contratistas de obra pública valencianos, a los que, además, todavía se les adeudan mil millones de euros por trabajos realizados a la Generalitat".

Así, el diputado socialista ha contrapuesto “el recorte del 3,1% de Fomento en la Comunitat Valenciana frente al 35% de Camps y sus consellerias inversoras”. También ha retado a Camps a que explique si lo que hay que hacer en estos momentos es invertir, “porque de enero a mayo de este año, la Generalitat sólo ha invertido en la comunitat 289 millones en obra pública, frente a los 777 del Gobierno central, o los más de 500 millones de los ayuntamientos valencianos”.

De esta manera, el portavoz socialista ha reiterado su propuesta de que “el Consell articule un Plan Extraordinario de Infraestructuras de colaboración público-privada como ha hecho el Ministerio de Fomento”, y que “alguien del Consell se siente ya con los contratistas de obra civil valencianos para negociar la articulación de dicho plan, y calmarles respecto a la parálisis inversora del Consell”.

Finalmente, Signes ha querido tranquilizar a la sociedad de Castellón, a quienes ha lanzado el mensaje de que “el AVE Valencia-Castellón no se para, porque el Corredor Mediterráneo sigue siendo una prioridad para el Ejecutivo, contrariamente a lo que sucedía en la época del gobierno de Aznar”.