El Servicio de Biodiversidad de la Generalitat cumple 25 años de objetivos superados
La Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente celebra estos días el 25 Aniversario de la creación del Servicio Biodiversidad de la Generalitat Valenciana, dedicado a la conservación de la flora y fauna silvestres. Cinco técnicos arrancaron aquél servicio que, como ha recordado el director general de Medio Natural, Alfredo González, “acumula grandes logros, algunos de los cuales han servido de ejemplo más allá de nuestras fronteras, una historia de 25 años de objetivos superados”.
“Cuando el servicio inició su andadura –ha continuado- se encontró con muchas trabas en una sociedad poco sensibilizada por la naturaleza y por la necesidad de conservarla. Para solucionar ese déficit se pusieron a trabajar y a desarrollar diferentes programas”.
Uno de los más destacados proyectos que ha desarrollado el Servicio es, sin duda, la creación de la figura de las Microrreservas de Flora, que se ha convertido hoy en una red de casi 300 espacios para la conservación de especies de flora amenazada. “Con esta red, la Comunitat Valenciana es líder en conservación botánica en un ámbito regional de toda Europa y ha permitido trabajar a pie de campo con las especies endémicas, en peligro de extinción o consideradas raras y salvarlas de la desaparición”, ha asegurado el director general.
Este exitoso modelo ha sido exportado a otras Comunidades Autónomas de España y otros países europeos que son asesorados por los técnicos del Servicio de Espacios Naturales y Biodiversidad.
También respecto a flora, el Centro de Investigación y Experimentación Forestal (CIEF) acoge uno de los más ambiciosos programas de conservación de flora de España. En sus instalaciones se guardan semillas de la práctica totalidad de especies de flora amenazadas y se han producido decenas de miles de plantones de estas especies para su introducción en el medio natural, dentro de planes de recuperación o de restauración de hábitats.
Entre los trabajos realizados cabe destacar la producción de más de un millón de semillas de la especie en peligro de extinción Silene ifacense, de la que sobreviven en el medio natural menos de 100 ejemplares, lo que asegura su pronta recuperación.
En cuanto a la fauna, “sin el trabajo de estos 25 años, quizá especies tan emblemáticas como el samaruc, el fartet o el cangrejo autóctono habrían desaparecido de nuestro territorio o, (en el caso del samaruc) incluso, del planeta”, ha señalado González.
Desde la Conselleria de Infraestructuras y medio Ambiente se ha realizado un importante esfuerzo con la producción de especies y reintroducciones, tanto de peces y tortugas como de aves que ha permitido reforzar poblaciones y crear nuevas colonias. “Precisamente la avifauna es uno de los principales valores de la Comunitat Valenciana y ha protagonizado muchos de los programas de conservación y recuperación, con sonoros éxitos”, ha añadido el director general.
Uno de ellos es la recuperación en nuestro litoral de la Gaviota de Audouin, una especie que agonizaba hace pocos años, con 30 únicas parejas reproductoras en Columbretes, y que hoy ha alcanzado más de 4.000 parejas en cinco puntos de nidificación. El calamón, la focha cornuda, el cernícalo primilla y la tortuga mediterránea son otras especies extinguidas que vuelven a criar en la Comunitat gracias a programas de reintroducción.
Existen líneas de conservación de aves acuáticas, aves marinas, aves rapaces y aves esteparias, de vertebrados marinos, de murciélagos y de fauna dulceacuícola. Varias especies de estos grupos han sido objeto de proyectos LIFE de la Comisión Europea. “De hecho, la Comunitat Valenciana es la región de Europa que más proyectos LIFE-Naturaleza ha recibido por parte de esta institución, de los que 14 han sido liderados por este Servicio”, ha recordado González.
También respecto a fauna, resulta de especial importancia la tarea que realizan los Centros de Recuperación. En estos centros se atienden animales heridos y enfermos por atropellos, electrocuciones o accidentes para que puedan ser liberados posteriormente en el medio natural.
El primer Centro de Recuperación, “La Granja” de El Saler, empezó a funcionar en 1988, con algo menos de 500 ejemplares. Con posterioridad se sumaron los centros de Castellón, “Forn del Vidre”, en 1989, y de Alicante, “Santa Faz”, en 1998. Entre los tres suman hoy en día más de 6.000 ejemplares pertenecientes a unas 200 especies atendidos al año.
Otra de las tareas en las que el servicio de Biodiversidad ha puesto especial empeño es en la investigación, pues sólo así se puede establecer cuál es el alcance de las poblaciones y la situación las especies, de ahí las líneas que se mantienen en colaboración con diferentes instituciones y universidades.
Igualmente, ha realizado un esfuerzo importante por inventariar todas las especies de flora y fauna del territorio, con la creación de Banco de Datos de Biodiversidad, que ya supera el millón de datos de más de 18.000 especies. Este banco de datos está disponible en Internet y en él se puede encontrar información, fotos y mapas de distribución de muchas de las especies.
