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El Hospital Sant Joan alcanza las 300 intervenciones de cirugía ortognática y destaca a nivel nacional

El Hospital Sant Joan alcanza las 300 intervenciones de cirugía ortognática y destaca a nivel nacional
  • La Unidad de Cirugía Ortognática interviene a una media de 40 pacientes al año, en su mayoría mujeres entre los 20 y 30 años

  • La prevalencia de las deformidades dentomaxilares es, aproximadamente, del 8 al 10% de la población general

El Hospital Universitario Sant Joan d'Alacant, a través de la Unidad de Cirugía Ortognática, dependiente de la Sección de Cirugía Maxilofacial, es el centro que encabeza la actividad de cirugía ortognática en la Comunitat y, a nivel nacional, uno de los primeros en número de intervenciones realizadas, ya que el ritmo medio es de una operación a la semana.

La Unidad de Cirugía Ortognática lleva en funcionamiento desde el año 2006 y, desde esta fecha, al ritmo antes mencionado, se han llevado a cabo unas 300 intervenciones, con una media de 40 casos anuales. “Este hecho revela una constancia en el mantenimiento de dicha frecuencia en el largo plazo, un aspecto que, quizás después de la experiencia, es el más difícil de lograr”, apunta el responsable de la Unidad de Cirugía Ortognática, Vicente Arenas.

Los pacientes con deformidades dentomaxilares que son intervenidos en esta unidad tienen en su mayoría entre los 20 y 30 años, aunque también se han dado casos de pacientes con más de cincuenta años y, en mayor parte, se trata de mujeres.

“Es una patología electiva”, explica Arenas, “y la intervención se realiza para mejorar desde el punto de vista de la oclusión y el funcionamiento articular, conllevando asismismo una mejora estética, que en algunos casos muy evidente. También hay que considerar que es una patología con un ritmo de tratamiento largo, que requiere una preparación ortodóncica, un estudio personalizado de modelos y clínico a medida de cada paciente, para mejorar lo más posible su oclusión y estética.”

Tampoco se puede obviar la vertiente psicológica; “la autoconfianza y autoaceptación que adquieren estos pacientes tras la intervención, perdiendo sus posibles complejos y volviéndose incluso, en algunos casos, más extrovertidos”, como reconoce el especialista.

En estas deformidades de maxilares y mandíbulas hay un componente genético evidente de penetrancia variable. Esto significa, según apuntan los profesionales, que en una familia donde hay antecedentes de prognatismo, hay muchas más probabilidades de que los hijos tengan el problema. La prevalencia es aproximadamente del 8 al 10% de la población general.

“Antes de la cirugía se realiza un estudio a medida de cada paciente: de su oclusión, radiográfico, cefalométrico, mediante escáner, simuladores, etc., pero lo más importante después de tantos casos tratados es la intuición clínica de la cara del paciente. Cuando entra por la puerta, ya me estoy imaginando mentalmente cuál va a ser su intervención, porque en ese momento recuerdo otros casos parecidos y cuál fue su resultado. La experiencia clínica es lo que al final más define cómo quedará el paciente”.

La intervención, después de una preparación ortodóncica previa, se realiza bajo antestesia general y dura una mañana de quirófano. Tras la cirugía, el paciente pasa a la Unidad de Cuidados Intensivos y, a continuación, a la planta de hospitalización. La duración del ingreso es de unos tres a cuatro días. Después, el paciente es controlado semanalmente, llevando la boca cerrada con gomas durante la primera semana postoperatoria y comenzando a abrirla durante varias veces al día tras esta primera semana e iniciando una gimnasia y empezando a comer alimentos blandos. Tras cuatro o cinco semanas de control postoperatorio, el paciente seguirá el tratamiento ortodóncico de terminación.

Además, la Sección de Cirugía Maxilofacial de Sant Joan, es de referencia provincial no sólo en Cirugía Ortognática, sino en otras áreas como son la cirugía de la Articulación Temporomandibular y de la Oncología y las Reconstrucciones Microquirúrgicas, con una amplia experiencia y multitud de pacientes tratados en los tres campos que podríamos considerar los más punteros y novedosos de la Cirugía Maxilofacial.

Es por ello que por este servicio se produce una rotación continua de MIR de otros hospitales de la Comunitat y de otras comunidades e incluso de centros de otros países, como el Hospital de Coímbra (Portugal).

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