Medio Ambiente amplía la ruta del Pinet, en el Parc Natural de les Salines de Santa Pola
El nuevo tramo de un kilómetro discurre junto a las balsas salineras
17.000 personas han recorrido el Pinet en el primer semestre de este año
El nuevo tramo del Pinet discurre junto a las balsas salineras del Pinet, donde se produce sal marina de gran calidad desde 1892. Esto facilitará el acercamiento al proceso de obtención de la sal, que en estos momentos se halla en fase de recolección.
La ampliación de la ruta del Pinet también supondrá un aumento de las zonas de uso público y, por consiguiente, mayores posibilidades para visitar las Salinas.
La ampliación del itinerario se realizará mediante la conexión con un pequeño cerro denominado “El Altillo”, al que se ha dotado de una torre de observación que ofrece una amplia panorámica de les Salines de Santa Pola.
En concreto, la Conselleria de Medio Ambiente ha instalado unos postes de madera para delimitar la ruta y una pantalla de carrizo para separar las charcas de la senda.
Inaugurado a finales de 2007, el nuevo itinerario se localiza junto a la playa del mismo nombre, al sudeste del parque natural. Desde esta ruta es posible observar algunos de los ambientes más representativos del parque (saladar, balsas salineras y ecosistema dunar). Desde la apertura de la ruta del Pinet, se han triplicado las visitas al parque natural. Solamente en el Pinet, se han registrado 16.682 visitas en el primer semestre de 2009.
Fauna y flora en el Pinet
En el nuevo tramo el visitante hallará la finca adquirida por la Conselleria de Medio Ambiente en 1994, que forma parte del circuito de agua de las Salinas del Pinet. Esta zona se mantiene inundada gracias a una entrada propia de agua que procede del mar, con el fin de mantener un hábitat adecuado para el fartet (pequeño pez exclusivo de algunos humedales del Mediterráneo).
Además, se han habilitado zonas de nidificación mediante la recuperación parcial de los diques que delimitaban las balsas, lo que ha favorecido la presencia de aves como la Avoceta, la Cigüeñuela, el Tarro Blanco, el Charrán Común o el Charrancito.
Estas zonas de nidificación también han hecho posible que el parque acoja gaviotas cada vez más difíciles de observar, como la gaviota picofina o la aún más escasa gaviota audouín.
En cuanto a la flora, destaca la presencia de una especie endémica, el Limonium santapolense, que fue descubierta en el Parc Natural de les Salines de Santa Pola.
