Santamaría: “El Botànic no tolera las discrepancias y no quiere que tengamos ni voz ni voto en las instituciones”
El secretario general del GPP en Les Corts, Luis Santamaría, ha afirmado hoy que el Consell del Botànic “no tolera las discrepancias, considera al PP disidente y no quiere que tengamos ni voz ni voto en las instituciones”.
Santamaría se ha pronunciado así en rueda de prensa sobre lo ocurrido ayer con la propuesta de los miembros del Consejo Rector de la nueva RTVV. El diputado popular ha expresado la “preocupación” de su grupo y ha dado la voz de alarma “sobre un hecho que consideramos grave: que de los 10 miembros del Consejo Rector el tripartito, con el principal sindicato, elija a siete”. En ese sentido, ha señalado que “aún no ha nacido la nueva RTVV y ya se demuestra que será parcial, sesgada y al servicio de los intereses del tripartito”.
“No se trata de una cuestión de sillones, se trata de garantizar la credibilidad de la nueva RTVV y su independencia, y es por eso por lo que estamos peleando”, ha indicado Santamaría. El diputado popular ha señalado que ve con preocupación “cómo hay cosas que se repiten en el tiempo, como aquella frase de Pere Mayor que decía que Ximo Puig ‘recibía todos los días un fax de Canal 9 y él elegía la noticia’. Parece que 30 años después no se ha aprendido nada y vamos a una situación muy semejante. Estamos convencidos de que a la vista de los acontecimientos parece que Puig quiere que esto siga así y nos vamos a oponer”.
A juicio de Santamaría, “los resultados de las elecciones del 26-J han puesto muy nerviosos a los representantes del tripartito y en consecuencia esta televisión nace con vocación de ser un instrumento electoral y de propaganda de la gestión del Gobierno valenciano, que por otra parte es una gestión prácticamente nula”.
El diputado ha denunciado “la segregación y el apartheid político al que intentan someternos desde el tripartito” y ha citado varios ejemplos, como el caso del Consejo de Transparencia, del que se excluyó al GPP –más tarde se modificó-, “la falta de consellers en los plenos y comisión, las dificultades para facilitar la documentación solicitada o el hecho de que Puig no se someta a sesión de control la próxima semana y que no haya preguntas de interés general hasta finales de septiembre”.
Santamaría ha pedido a Ciudadanos “que se desmarque de este intento de manipulación en el Consejo Rector y la nueva RTVV, porque queda tiempo para negociar”. Así, ha manifestado que al GPP no le gustaría que el nuevo servicio de radiodifusión “naciera, en cuanto a credibilidad e independencia, muerto”.
Vulneración de derechos
Por otro lado, Santamaría se ha referido también a lo ocurrido ayer en la Junta de Síndics, en la que se negó la propuesta del GPP de que en el pleno del día 27 se vieran la Ley de Incompatibilidades y la Ley del Pacto Educativo.
Sobre la ley de Incompatibilidades, el diputado popular ha recordado que ya se incluyó en el orden del día de pleno en el mes de abril. “Se retiró porque PSPV y Compromís no estaban en disposición de abordar este debate, por sus fricciones internas, y han pasado tres meses y estamos igual, no son capaces de sentarse a dialogar, y además tenemos la gravedad de lo que ha pasado con las destituciones de Salas y Cucarella”. “Este es un Consell de funambulistas, que dedica todos sus esfuerzos a mantener los precarios equilibrios que lo sostienen y como consecuencia camina muy lento en la gestión”, ha indicado.
Además, Santamaría ha recordado que al GPP se le impidió preguntar la semana pasada en pleno por la suspensión del festival Marenostrum, “pese a que la interpelación estaba bien planteada por el mecanismo de urgencia”. Al respecto, el secretario general del GPP ha señalado que los populares se van a defender “presentando un recurso ante los órganos de la cámara correspondientes y vamos a llegar hasta el final en la defensa de nuestros derechos, y por tanto llegaremos hasta el Tribunal Constitucional para evitar actitudes caciquiles”.
“Se han pisoteado derechos fundamentales, en este caso de hacer labor de oposición. Si permitimos esto no sabemos cuál será la próxima muestra de totalitarismo”, ha concluido.
