Sanitat elabora un protocolo para la atención sanitaria en casos de violencia de género
Uno de los objetivos fundamentales es contribuir a que la ayuda proporcionada a la víctima sea eficaz e inmediata
Sanitat ha recibido más de 5.500 informes médicos por presunta violencia doméstica desde 2005
Los objetivos fundamentales del protocolo (formado por materiales informativos tanto para el personal sanitario como para la presunta víctima), se centran en sensibilizar a estos profesionales sobre la magnitud de la violencia de género como problema de salud, además de facilitar criterios que permitan guiar la búsqueda activa, la detección precoz y la valoración de las situaciones de maltrato en el ámbito de la atención primaria y especializada.
Una vez se ha realizado esta detección, se trata de elaborar unas pautas que permitan guiar las actividades de intervención sanitaria a seguir. Otro de los objetivos fundamentales es facilitar una serie de instrumentos que permitan registrar los casos de violencia y las intervenciones sanitarias instauradas tras su detección y valoración.
Según el Conseller de Sanitat, Manuel Cervera, “es más que necesario contribuir desde el sector sanitario a la sensibilización de la población general sobre el tema de la violencia de género. El objetivo fundamental es que la atención a la víctima de este tipo de violencia sea eficaz además de inmediata¨.
Por otra parte, además del protocolo Sanitat ha impartido cursos que abordan el problema de la violencia doméstica, de modo que los profesionales sanitarios sepan detectar y actuar ante estos casos. Estos cursos se dirigen a médicos generales de centros de salud y de servicios de urgencias, a matronas, enfermeros, trabajadores sociales y técnicos de salud pública.
Las Bases del Protocolo
De este modo, se van a llevar a cabo una serie de actividades de sensibilización dirigidas al personal sanitario enmarcadas dentro de un ¨Plan de Intervención¨, que se pondrá en marcha tras realizarle a la presunta víctima una serie de preguntas y tras rellenar unos cuestionarios. Este plan distingue entre dos situaciones claras:
Cuando la mujer NO se encuentra en peligro extremo, y cuando sí se halla en un tipo de situación que requiere de una actuación inmediata.
En el primer caso, se informa a la mujer sobre la situación en la que se encuentra, sus derechos y los recursos de los que dispone.
En caso de que la víctima sí se encuentre en un caso de peligro extremo, es también informada de sus derechos y recursos existentes. Aquí, si se estima oportuno, son remitidas al hospital, u otros servicios sanitarios especializados más cercanos. El profesional se asegura en segundo lugar de que la víctima esté acompañada en todo momento tras su derivación al trabajador social de referencia o al Centro de Mujer 24 horas. A partir de este momento en caso de que la mujer tenga hijos, el pediatra también es informado y posteriormente, se emite el informe por presunta violencia de género doméstica, además de incluir en la historia clínica el episodio describiendo las lesiones físicas y psíquicas.
Colaboración con la Conselleria de Justicia
La colaboración entre ambas consellerias está siendo muy estrecha para poder ofrecer el mejor servicio a las víctimas de la violencia de género.
La Generalitat coordinará los hospitales, centros de atención primaria y de especialidades y las Unidades de Conductas Adictivas de la Comunitat Valenciana con los Centros Mujer 24 Horas y los Centros de Atención Integral con el fin de agilizar la atención precoz de los casos de violencia machista.
Por su parte, la Conselleria de Justicia y Administraciones Públicas llevará a cabo cuantos protocolos de actuación sean necesarios para la atención a las víctimas de la violencia machista y organizará cursos de formación destinados a los profesionales de su ámbito de actuación para garantizar la correcta atención de las víctimas, además de realizar actividades dirigidas a las mujeres para que conozcan todos los servicios disponibles a su alcance.
Más de 5.500 informes desde 2005
Según los datos de los 5.504 informes recibidos por Sanitat desde 2005, se desprende que el 66,6% de las personas adultas atendidas por presunta violencia de género tienen entre 20 y 39 años de edad, el 19’3% tienen entre 40 y 49 años y el 10’9% superan los 50 años. Sólo el 3’1% de las personas adultas agredidas son menores de 20 años.
Más de la mitad de las personas agredidas son españolas, concretamente el 55’8%, mientras que 21’8% de los casos de presunta violencia doméstica se han registrado en personas de América Latina, el 10’1% de países de Europa del Este, el 6’6% tienen su origen en personas procedentes de otros países de la Unión Europea, el 3’6% del Norte de África, y el resto son personas originarias del resto de África, Asia y Norteamérica.
Los informes reflejan también que el 44’5% de las personas agredidas están casadas o viven en pareja, el 35’1% son solteras y el 18% están separadas o divorciadas.
En cuanto a su situación laboral, el 54’1% de las personas tienen un trabajo remunerado, mientras que el 45’9% están en situación de desempleo. Además, el 41’8% están en posesión de los estudios primarios, el 36’9% de los estudios secundarios, el 11’3% había cursado estudios universitarios y el 10% eran personas sin titulación.
