Sánchez-Barcáiztegui alerta del riesgo y los retrasos que provoca la ralentización de la V-21

"El estado en que se encuentran las obras de ampliación de la V-21 es muy preocupante por el riesgo de accidentes y por los embotellamientos que se producen en una de las carreteras más congestionadas de la Comunitat", ha manifestado hoy el secretario autonómico de Infraestructuras y Transporte, Victoriano Sánchez-Barcáiztegui, sobre la ralentización de las obras del tercer carril del principal acceso por el norte a Valencia.

La ejecución del tercer carril de la V-21 entre Puçol y el barranco del Carraixet se adjudicó en septiembre de 2008 por el Ministerio de Fomento, que tiene pendiente la licitación del tramo hasta Valencia. Este último tramo se encuentra actualmente en fase de proyecto, mientras que el adjudicado en 2008 está en obras, con señalización provisional, carriles restringidos y limitación de velocidad a 80 kilómetros por hora.

Las obras se encuentran entre las actuaciones cuya paralización se anunció en julio de 2010 con motivo del recorte de inversiones aplicado por Fomento y cuya ejecución se aseguró después que no se detendría.

Sánchez-Barcáiztegui ha manifestado su preocupación por el riesgo de nuevos recortes presupuestarios por parte del Ministerio de Fomento "que impidieran la ejecución de la obra en toda la longitud prevista en el proyecto".