Orengo: “Es más difícil que a un valenciano en paro le toque una ayuda del Plan de Empleo de la Generalitat que un cupón”
El portavoz del grupo socialista en la Diputación, José Manuel Orengo, ha remarcado que “es más difícil que a un valenciano le toque una ayuda del Plan de Empleo de la Generalitat que un cupón de la Once, y en todo caso le tocará a partir de octubre”. En este sentido, y con respecto al Plan de Empleo conjunto de las Administraciones Públicas Valencianas que se ha trasladado hoy a la entidad provincial ha incidido en que “el principal problema que tenemos los valencianos tendría que contar con una mejor coordinación, puesto que cuando se habla de emergencia no podemos estar nueve meses para poner en marcha una iniciativa, mientras que la gente está en casa sin tener acceso al empleo”. Además, ha querido subrayar también que esta propuesta del PP “afectará únicamente al uno por mil de la ciudadanía de esta Comunitat”.
De esta forma, Orengo ha apuntado varias razones para justificar la abstención de su grupo en la Diputación a la propuesta del PP. En primer lugar, ha señalado que “cuenta con muy poca dotación económica, lo que supone que afecta a una parte muy reducida de las personas que se encuentran ya en una situación desesperada ante la falta de empleo”, por eso, lo ha calificado como “otra intentona de frustrar las esperanzas de mucha gente que en este momento está en muy mala situación” y ha destacado que “estoy seguro de que entre todos somos capaces de ofrecerles una mejor solución a este problema”.
Por otro lado, ha incidido en que “se han excluido de las bases de este plan a todas las empresas públicas”, al tiempo que ha destacado no entender “esa concepción ideológica que impide que una empresa pública pueda disfrutar de una subvención para poder dar empleo a quien lo necesita, dejándolo todo en manos de la iniciativa privada”. Al mismo tiempo, ha calificado el planteamiento de este Plan de Empleo de “rocambolesco” puesto que “en primer lugar debe ser la Generalitat la que saque una orden, posteriormente debe hacerlo la Diputación y, por último, el ayuntamiento, lo que supone la puesta en marcha de un sistema muy poco ágil”. A esto cabe sumar que “el hecho de que el ayuntamiento sea el último eslabón puede comportar que, ante el incumplimiento de la propia empresa o de cualquiera de las administraciones, sea éste el que pague las consecuencias”.
Finalmente, Orengo ha querido insistir en que “no vamos a votar en contra, nos vamos a abstener, porque consideramos que en una situación como ésta cualquier cosa supone una ayuda”, pero ha insistido en que “las administraciones deberían trabajar para consensuar una iniciativa más coherente, eficiente y rápida, puesto que el procedimiento que contempla este Plan conllevará que, como mínimo hasta finales de octubre, no haya ningún contratado”. Así, ha destacado que “no podemos votarlo a favor porque todos sabemos que no está bien hecho, es cierto que a alguien beneficiará y por eso no nos abstenemos, sino que nos manifestamos con una abstención muy crítica”.
Ayuda para comedores escolares en los meses de verano
Por otro lado, la también diputada socialista, Concha Andrés, ha defendido la aprobación de una moción en la que el PSPV-PSOE solicitaba que la Diputación de Valencia disponga del crédito necesario para la puesta en marcha de un programa municipal de becas de comedor para los meses de verano. En este sentido, y con respecto a la aportación de 500.000 euros que ha anunciado la entidad provincial para el Banco de Alimentos, Andrés ha incidido en que “esta cantidad no es suficiente” y ha pedido un mayor esfuerzo.
Además, la diputada del PSPV-PSOE ha remarcado que hay cerca de 300.000 niños en la provincia de Valencia, al tiempo que los datos sitúan a una media del 24% de los menores bajo el umbral de la pobreza. Por este motivo, ha hecho hincapié en que “se trata de más de 50.000 niños que necesitan una ayuda urgente, y que no podrán recibirla únicamente con esta partida que nos parece claramente insuficiente”.
